Por tanto, el plazo de la instrucción del caso vencerá el próximo jueves 29 de julio, con lo que no se podrán pedir más diligencias aunque ha dejado la puerta abierta para seguir incorporando a la causa pruebas que ya se han acordado previamente como informes policiales. «Visto el actual estado de la causa, no procede acordar la prórroga de la instrucción, sin perjuicio de la práctica y recepción de las diligencias ya acordadas», reza el auto.
De esta forma, el titular del Juzgado Central de Instrucción 5 de la Audiencia Nacional ha optado por poner fin a la instrucción tras interrogar el pasado 16 de julio al extesorero Luis Bárcenas a raíz de la carta que envió a Anticorrupción antes del juicio por el presunto pago en B de la reforma de la sede del PP -pendiente de sentencia-.
De este modo, el juez resuelve que para «el buen fin de la instrucción y una vez celebrada el pasado día 16 la de julio la declaración de Luis Bárcenas Gutiérrez, de conformidad con lo informado por el Ministerio Fiscal y visto el actual estado de la causa no procede acordar la prórroga».
La abogada del Estado entiende que se está ante el supuesto previsto en el Art. 324.1 párrafo segundo de la Lecrim, que establece que de constatarse que la investigación no puede quedar finalizada en el plazo de un año, como establece la ley 2/2020, la instrucción podrá prorrogarse por un periodo de seis meses.
El nuevo régimen jurídico de plazos de la investigación entró en vigor el pasado 29 de julio, fecha en la que empezó a computar el plazo de la instrucción de esta causa, con lo que, según indica el juez en su auto, vencerá el próximo jueves.
La investigación de la caja b del PP se reabrió en 2017 a raíz de que el cabecilla de Gürtel, Francisco Correa, asegurara en el macrojuicio a la trama que cobró comisiones por muchas obras y que de ese dinero le daba el 2 o el 3% al extesorero, por conseguir obras en ministerios como Fomento o Medio Ambiente, lo que Bárcenas negó entonces.