El Gran Premio arrancó con un espeluznante accidente en el que se vieron implicados 6 coches, ya en la salida se vio que la peor parte se la llevo Zhou, que recibió un golpe en la salida del británico Russell y a más de 200 km/h salió despedido con el coche bocabajo para terminar chocándose a gran velocidad contra el muro.
No se supo nada hasta 10-15 minutos después, cuando se confirmó que estaba consciente y que había sido trasladado a un hospital. A partir de ahí la realización ya comenzó a emitir las repeticiones, la de Zhou dio miedo, mucho miedo. Albon, Russell y el piloto chino quedaron fuera. Ocon y Tsunoda sufrieron grandes daños pero pudieron salir tras la bandera roja que duró casi una hora.
Al no haberse pasado ningún sector en la salida, cuando se reanudó la carrera todos volvieron a salir desde las posiciones iniciales, Sainz salió ganando ya que perdió el primer puesto en la salida inicial. Esta vez defendió como un león y arrinconó a Max en la segunda salida para proteger la primera posición.
A las pocas vueltas Verstappen pasó a Sainz tras un error del madrileño, se veía venir un nuevo día de dominio del holandés pero esta vez los problemas de fiabilidad afectaron a Red Bull, el monoplaza del holandés comenzó a sufrir problemas y entró a boxes, antes ya le pasó Sainz y Leclerc. El monegasco rodó más fuerte que el español y volvió a frustrar a su compañero, pero esta vez duraría poco.
La oportunidad y el punto de suerte que necesitaba Sainz llegó a 12 vueltas del final, el coche de Ocon se paró en la recta de salida y salió el Safety Car. Todos pusieron blandos menos Leclerc, que era primero y no podía arriesgar, Sainz con blandos le pasó enseguida y ahí protegió el primer puesto beneficiado por la lucha entre Hamilton y Leclerc, Pérez se metió segundo tras una gran remontada y Alonso terminó 5º y rozó el 4º puesto. Brutal el asturiano una vez más.
Este 3 de julio de 2022 quedará marcado para siempre en la vida de Carlos Sainz y de gran parte de España. Llegarán muchas más, la espera ha terminado. La espera ha terminado. Ahora, a disfrutar.