La cocina china tiene platos que se han convertido en auténticos éxitos de los restaurantes chinos de occidente. Bien es cierto que cada restaurante lo hace a su manera, adaptando sus recetas originales a los productos y verduras que tenemos en España.
El pollo con salsa agridulce al estilo chino es un plato de origen cantonés. La cocina cantonesa es la más conocida fuera de China, la más extendida en los países occidentales y la que suelen cocinar en la mayoría de los restaurantes chinos que conocemos. La cocina cantonesa se caracteriza por la gran variedad de productos para cocinar, así como por sus sencillas preparaciones. Los sabores son suaves y equilibrados. No suelen utilizar picantes ni especias muy llamativas como otros estilos de cocina oriental.
Para elaborar el pollo agridulce es importante marinarlo previamente para que coja sabor. Además, uno de los puntos fuertes de este plato es su rebozado el cual le proporciona al pollo un recubrimiento que, con la salsa agridulce, queda esponjoso y muy rico. Lo ideal es añadir el pollo a la salsa con las verduras en el último momento para que el rebozado esté en su punto.
Para hacer el pollo agridulce podemos elaborar la salsa agridulce nosotros mismos o comprarla en formato comercial.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 20 minutos
- Tiempo de cocinado: 20 minutos
- Tiempo total: 40 minutos
- Raciones: 4
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: china
- Calorías por ración (kcal): 542
Ingredientes del pollo agridulce chino para 4 personas
- 1 pechuga de pollo entera (600 g aproximadamente)
- 1 huevo
- 2 cucharadas de salsa de soja
- 10 ml de vino de arroz
- 100 g de maicena (para rebozar)
- 100 ml de aceite de girasol
- ½ cebolla
- ½ pimiento verde
- ½ pimiento rojo
- 1 zanahoria
- 2 dientes de ajo
- 2 rodajas de jengibre fresco
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
- 4 cucharadas de salsa agridulce
- Cebolleta china fresca (opcional para decorar)
Cómo hacer pollo agridulce chino
Para elaborar el pollo agridulce preparamos primero el pollo y lo marinamos. Para ello, cortamos la pechuga de pollo entera en dados más o menos del mismo tamaño.
En un bol, ponemos el pollo en dados y le añadimos 1 huevo entero, 2 cucharadas de salsa de soja y 10 ml de vino de arroz. Lo mezclamos todo y dejamos reposar en la nevera unos minutos.
Sacamos el pollo de la nevera y lo rebozamos con 100 g de maicena. Lo freímos en 100 ml de aceite de girasol a una temperatura de unos 170 ºC.
Reservamos los trozos de pollo rebozados y fritos para reincorporarlos más adelante.
El siguiente paso es preparar las verduras que acompañan a nuestro pollo agridulce. Lavamos, pelamos y troceamos ½ cebolla, ½ pimiento verde, ½ pimiento rojo en dados. Pelamos 1 zanahoria y la cortamos en rodajas. Pelamos 2 dientes de ajo y 2 rodajas de jengibre fresco y lo picamos fino. Ponemos el jengibre y los ajos picados en un wok o una sartén con 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra y lo sofreímos hasta que empiecen a liberar su aroma y a dorarse.
Añadimos al wok o a la sartén el resto de verduras troceadas y las salteamos a fuego alto durante 3-4 minutos.
Incorporamos las 4 cucharadas de salsa agridulce al wok o a la sartén y le damos unas vueltas para que se integre. Añadimos el pollo rebozado que teníamos reservado. Lo mezclamos todo bien para que el pollo coja todos los sabores de la salsa agridulce y de las verduras.
Servimos el pollo agridulce (chino) decorado con la cebolleta china cortada en rodajas. Podemos acompañar este plato con una cerveza asiática, que lo acompaña perfectamente.
Resumen fácil de preparación
- Cortar el pollo en dados del mismo tamaño aproximadamente
- Marinar el pollo con la salsa de soja, el huevo y el vino de arroz
- Rebozar los trozos de pollo en maicena y freírlos en abundante aceite
- Reservar los trozos de pollo para añadirlos después
- Lavar y trocear las verduras. Poner a dorar los ajos picados con el jengibre
- Añadir al wok las verduras y saltear a fuego vivo
- Incorporar la salsa agridulce y el pollo al wok y darle unas vueltas
- Servir el pollo agridulce con una cerveza asiática bien fría