Pasajeros pasan la madrugada atrapados en un tren averiado sin explicaciones, mientras crece el malestar y exigen inversiones urgentes.
Noche angustiosa y trenes encerrados en vía
La pesadilla comenzó el lunes por la tarde, cuando un tren Avant de las 19:10 desde Madrid sufrió una avería grave en el pantógrafo, causando daños en la catenaria a la altura de la zona de La Sagra. El convoy quedó detenido durante horas, sin aire acondicionado, sin luz ni máquinas operadoras, y con menores entre los pasajeros. Imágenes de usuarios afectados circulan en redes, denunciando que todo apunta a un corte intencionado del cobre.
Sin información, el ambiente se tornó caótico: desmayos, mareos y angustia. Tras esperar en vano, los pasajeros fueron realojados en otro tren que partía a las 20:10, llegando a Ciudad Real pasadas las 3:15, y a Puertollano cerca de las 4:00, acumulando más de ocho horas de retraso.
Decenas de viajeros indignados exigen explicaciones
En la mañana del martes, la estación de Ciudad Real vivía escenas de caos absoluto. Centenares de usuarios abarrotaban andenes y vestíbulo, mientras unidad policial fue destinada para evitar altercados. Renfe, que no ha informado aún sobre el incidente, ha habilitado autobuses como solución provisional, pero el servicio ferroviario permanece suspendido hasta nuevas órdenes.
Pasajeros entrevistados por La Tribuna repetían enérgicamente: “Nos sentimos completamente abandonados”, “¿qué garantía tenemos de que no volverá a ocurrir mañana?”, muestran la frustración que moviliza cada mañana a trabajadores y estudiantes de la línea.
Usuarios exigen inversiones y responsabilidades
La Asociación de Usuarios Avant Ciudad Real–Puertollano–Madrid, que ya ha alertado en meses anteriores sobre la precariedad de la línea, exige responsabilidades a Renfe y Adif. Denuncian que el servicio está “crónicamente degradado” y solicitan inversiones urgentes, un plan de renovación de infraestructura y un compromiso firme con la fiabilidad de una ruta que sostienen cientos de desplazamientos diarios.
“Nos tratan como ciudadanos de segunda”, señalan desde la asociación, recordando el silencio y falta de respuestas de las autoridades ante un problema que ha superado ya el nivel de tolerancia de los usuarios.
Continúa la incertidumbre y se sopesa respuesta política
Este martes, la situación sigue sin despejarse. Aunque circulan autobuses entre Ciudad Real, Puertollano y Madrid, la garantía del servicio es inexistente. Los usuarios reclaman:
- Explicaciones urgentes sobre lo ocurrido y sobre posibles reclamaciones.
- Plan de inversiones y renovación inmediata de infraestructuras.
- Compromiso institucional ante futuros incidentes.
En los próximos días, la presión social y política al Ministerio de Transportes podría intensificarse. Vecinos y usuarios advierten: si no llega una reacción contundente, la línea Avant podría convertirse en un símbolo de frustración y abandono institucional en Castilla‑La Mancha.
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