Neymar Jr. en su breve declaración, solo respondió a las escasas preguntas de la fiscalía y la de su abogada defensora (solo hizo dos). El delantero brasileño, que se enfrenta a una petición de cinco años de cárcel, negó este martes, en la segunda sesión del juicio, que participara en la negociación con el club azulgrana y responsabilizó de la misma a su padre, en también imputado Neymar Da Silva Santos.
“No participé en la negociación. Firme lo que me dijo mi padre”, subrayó, para después admitir su preferencia por jugar en el Barça. “La verdad es que tenía varias ofertas de clubs, pero mi sueño era jugar en el Barcelona. Desde pequeño tenía esa ilusión. Mi corazón me decía de ir al Barça”.
Antes de la declaración de Neymar, el presidente del tribunal, José Manuel del Amo, quiso dejar claro que no había existido trato de favor hacia el jugador brasileño por dispensarle de asistir a las sesiones del juicio. En una alocución fuera de lo habitual, el togado aseguró: “Se dejó marchar no porque sea un jugador de la élite mundial y estrella de la selección brasileña, sino porque las cuestiones previas son muy áridas. Y en segundo lugar, se había puesto a disposición del tribunal viajando igual de madrugada (…) Se trata de dar un trato digno a las personas”. Insistió: “No ha habido ningún trato de favor a Neymar”, ni “se le está haciendo la ola como si estuviéramos en la grada”.
El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, reconoció este martes en el juicio que se celebra en Barcelona contra Neymar y sus padres por presunta corrupción y estafa que el club blanco ofreció en 2011 45 millones de euros al Santos por el delantero. Esta propuesta la hizo llegar al club brasileño a través de la dirección deportiva, afirmó.
Al ser preguntado por qué, al final, el jugador recaló en Barcelona, el dirigente merengue aseguró: “Los jugadores van adónde quieren y Neymar quería ir al Barcelona”. Este testigo no recordó los extremos de esta oferta porque, según sus explicaciones, no participó en ninguna de las negociaciones entre el Madrid y el Santos. Ni en 2011 ni en 2013, cuando firmó definitivamente por el Barça.
JUICIO POR CORRUPCIÓN Y ESTAFA
Neymar Jr está siendo juzgado en la Audiencia de Barcelona por presunta corrupción entre particulares por su contrato para fichar por el Barça y por el que la fiscalía reclama dos años de prisión y 10 millones de multa, mientras la acusación particular, ejercida por la compañía brasileña Dis, que tenía el 40% de los derechos federativos del jugador, solicita cinco años de cárcel. En el banquillo también está su padre, Neymar Da Silva Santos, su madre, Nadie Gonçalves, el exdirigente del Santos Odilio Rodrígues, el que fuera presidente del FC Barcelona Sandro Rosell, y su vicepresidente en la fecha de los hechos Josep María Bartomeu (la fiscalía no le acusa). La vista que se desarrollará en siete sesiones concluirá el 31 de octubre.
En la primera sesión del juicio, que empezó el lunes, el tribunal decidió dispensar al jugador brasileño para poder participar en los partidos previstos del Paris Saint Germain y poderse entrenar. Los magistrados tomaron el mismo acuerdo para el resto de los acusados. En las cuestiones previas, los abogados de la defensa plantearon que los hechos que se juzgan son los mismos que los que propiciaron en el 2016 la condena del Barça por presuntamente defraudar a Hacienda 13 millones de euros. Los letrados, además, subrayaron que la justicia española no era competente para sentenciar este asunto, pues el fichaje de Neymar se gestó en Brasil y en ese país no existe el delito de corrupción entre particulares.
El fiscal relata en su escrito de acusación que Sandro Rosell, como presidente del Barcelona entonces, empezó las negociaciones para fichar a Neymar en 2011, cuando jugaba en el Santos. El entones máximo mandatario azulgrana y el padre del delantero brasileño, que representa a su hijo, acordaron que el Barça pagaría 40 millones al jugador para asegurar su fichaje en 2014, cuando quedara libre del Santos, y que le anticiparía 10 millones en el momento con la condición de que Neymar debía devolver el dinero si incumplía el acuerdo. En el 2013 el Barça firmó otro convenio con el Santos por una opción preferente de compra de tres jugadores por 7,9 millones. Según la acusación, ese contrato, así como otros rubricados para la celebración a partidos amistosos, estaba unido al del fichaje de Neymar. Este plan se diseñó, según la fiscalía, para no pagar el porcentaje que le correspondía a la compañía DIS.