El presidente del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Paco Núñez, ha afirmado que espera que Emiliano García-Page tenga “valentía” ante Pedro Sánchez en el próximo acto que protagonizarán en Toledo y le ha instado a que reclame al presidente del Gobierno la eliminación temporal y transitoria del impuesto de hidrocarburos.
Así lo ha indicado Núñez en una rueda de prensa en Cuenca, donde está manteniendo una reunión con los diputados nacionales y senadores del PP de Castilla-La Mancha, junto al vicesecretario de Coordinación Autonómica y Local del PP, Pedro Rollán.
El presidente regional del PP ha recordado que esta medida fue planteada por el presidente nacional del PP, Alberto Núñez Feijóo, por lo que ha indicado que le gustaría que Page la haga suya y se la plantee a Sánchez en este acto del próximo 9 de septiembre.
La pregunta, a juicio de Núñez, “es clara”: “¿Queremos que llenar el depósito de combustible sea más económico los próximos 6 meses para familias, autónomos y pymes?”. “La alta inflación ha generado un exceso de recaudación multimillonario, por lo que el Gobierno tiene dinero para hacerlo”, ha añadido.
Por ello, el presidente de los ‘populares’ ha cuestionado a Page si “pensará más en el PSOE o en Castilla-La Mancha” cuando esté ante Sánchez.
Núñez ha aseverado que “la peor noticia para los castellanomanchegos” es que Sánchez permanezca en el Gobierno de España, ya que los españoles “no aguantan otra legislatura de Sánchez”. “La mejor forma de que Sánchez siga gobernando es que siga gobernando el PSOE en Castilla-La Mancha”, ha dicho.
En este sentido, el presidente el PP regional ha destacado que “la mejor forma de que Sánchez no sea presidente es que en Castilla-La Mancha no haya un PSOE gobernando y ayudando a Sánchez”.
Por todo ello, Núñez espera que Page “sea valiente, no se asuste ante Sánchez y anteponga los intereses de Castilla-La Mancha frente a los del PSOE”, reclamando una idea “clara” y es que le exija la eliminación temporal y transitoria del impuesto de hidrocarburos para ayudar a las familias, a las pymes y a los autónomos a tener un otoño y un invierno “más desahogado” ante una inflación disparada en Castilla-La Mancha, y siendo una región con el peor salario medio del país.
De otro lado, el presidente del PP-CLM ha puesto en valor la apuesta clara de la dirección nacional del Partido Popular de Alberto Núñez Feijóo por celebrar la reunión de la Interparlamentaria del partido en Castilla-La Mancha los próximos 17 y 18 de septiembre en la ciudad de Toledo.
Así, ha recordado que el Congreso Nacional del PP se celebró en Sevilla “y no fue por casualidad” sino que fue una apuesta clara por las elecciones andaluzas en las que el partido tenía unas altas expectativas y por el apoyo al candidato Juanma Moreno, por lo que celebrar este primer acto nacional de inicio del curso político en la región “es la muestra inequívoca de la apuesta de Feijóo por Castilla-La Mancha y por mejorar la vida de los castellanomanchegos”.
Núñez ha destacado que el PP regional lleva los últimos 3 años trabajando intensamente en construir la alternativa al socialismo en la Comunidad Autónoma. “No hemos venido a pelearnos, a discutir, a tensar el debate político, a insultar o a elevar la voz, hemos venido a mejorar la vida de los castellanomanchegos”.
Algo que, según ha añadido, hizo como alcalde de Almansa y como presidente de la Diputación de Albacete, donde apostó por la mejora de la calidad de vida de sus vecinos, para que la gestión “permitiera tener más oportunidades de empleo, más protección social, mejorar el entorno de convivencia y una mejor calidad de vida para todos”.
“Ese es el mismo espíritu que me mueve para ser presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha”, ha aseverado, al tiempo que ha indicado que “ningún socialista le va a poner límites a Castilla-La Mancha”, ya que los castellanomanchegos serán “lo que quieran ser” y “crecerán, evolucionarán y mejorarán sus condiciones de vida tanto como quieran y mi obligación será acompañarles en esa evolución hacia el futuro”.
Núñez quiere liderar un cambio moderado y tranquilo con un Gobierno centrado en los castellanomanchegos “que no se ponga límites y que de manera pausada va evolucionando la región para conquistar metas en empleo, educación, sanidad o política social”.