Agentes de Policía Nacional de Albacete han detenido a un repartidor por su presunta implicación en los delitos de usurpación de estado civil y estafa. La investigación comenzó cuando un ciudadano denunció que había recibido una carta de una empresa de telefonía en la que le reclamaban el pago de una deuda de 1.659 euros por la adquisición de dos terminales móviles de alta gama que él no había realizado.
Al parecer los teléfonos habían sido adquiridos directamente a la compañía suplantando los datos del denunciante y habían sido entregados en un establecimiento comercial de la compañía telefónica de la capital, ha informado la Delegación del Gobierno en nota de prensa.
Tras las gestiones de investigación realizadas, se pudo determinar que los teléfonos que la compañía telefónica había expedido, nunca llegaron a ser entregados en la tienda a la que habían sido remitidos, por lo que la investigación se centró entonces en la empresa de reparto de paquetes.
Se localizaron irregularidades en otros envíos similares, todos ellos con destino al mismo establecimiento y realizados por el mismo repartidor, que finalmente fue detenido como presunto autor de los delitos de usurpación de estado civil y estafa.