En un episodio que ha puesto en vilo a la comunidad de Puertollano, la planta de Fertiberia ha sido el epicentro de una emergencia medioambiental este miércoles, al detectarse una fuga de amoniaco que generó una densa nube tóxica. Este incidente, que ocurrió aproximadamente a las 15.15 horas, obligó a la activación inmediata del plan de autoprotección del complejo petroquímico de la ciudad, un referente industrial en la región.
La alarma se disparó cuando un compresor en las instalaciones de Fertiberia comenzó a liberar amoníaco, un gas altamente tóxico y peligroso si se inhala en concentraciones elevadas. El servicio de Atención y Urgencias 112 de Castilla-La Mancha fue notificado del incidente a las 15.26 horas, desencadenando una rápida respuesta de los servicios de emergencia.
La situación ha requerido medidas excepcionales para garantizar la seguridad de todos los trabajadores del área, incluyendo el confinamiento completo de la planta de Repsol, ubicada en las inmediaciones. Este procedimiento se implementó como precaución para proteger a los empleados de posibles efectos adversos derivados de la nube tóxica.
Afortunadamente, el episodio fue gestionado con eficacia por los equipos de emergencia, que incluyeron a la Policía Nacional, Policía Local, bomberos del propio complejo petroquímico, bomberos del parque de Puertollano y Protección Civil. Su intervención permitió controlar la fuga sin que se reportaran daños significativos ni a los trabajadores ni a la población cercana.
Las autoridades han confirmado que la situación ya está completamente solventada. No obstante, el suceso ha requerido la activación de protocolos de seguridad específicos, incluyendo, en algunos casos, la evacuación de personal de empresas contratistas que operan en el complejo.
Este incidente destaca la importancia de mantener rigurosos controles de seguridad en las instalaciones industriales, especialmente en aquellas que manejan sustancias peligrosas. La rápida respuesta y coordinación entre los distintos cuerpos de seguridad y emergencia han sido clave para evitar que el incidente escalara a una situación de mayor riesgo.
Puertollano, con su amplia base industrial, está familiarizado con los desafíos que conlleva la gestión de riesgos medioambientales. Este episodio sirve para darle importancia a la necesidad de estar siempre preparados para responder a cualquier eventualidad, garantizando así la seguridad de los trabajadores y la protección del medio ambiente.