Pedro Sánchez, manejando la reciente crisis de alianzas originada tras los resultados del 23-J, decide descansar en su tradicional retiro vacacional, La Mareta. Confía en sus acuerdos con los separatistas mientras disfruta de este encantador lugar en Lanzarote, mientras Feijóo se enfrenta a la tarea de una difícil investidura.
Refugio vacacional de la Familia Real
Ubicada en Teguise (Las Palmas), en la isla de Lanzarote, La Mareta es reconocida como Patrimonio Nacional y pertenece a la Familia Real Española. No se sabe con precisión qué días de agosto el presidente en funciones tomará sus vacaciones ni cuánto tiempo estará allí, ni si combinará su estancia con otro de sus destinos favoritos: Doñana.
Lujo y descanso en La Mareta
Dentro de La Mareta, todos los lujos aguardan a Pedro Sánchez y su familia, quienes confían en repetir mandato en Moncloa durante cuatro años más. Esta moderna residencia fue mandada a construir por el rey Hussein de Jordania a finales de los años 70 como regalo para Juan Carlos I.
Sánchez, Begoña y sus hijas disfrutan de más de 10.000 metros cuadrados y acceso directo a una playa privada. La residencia cuenta también con diez bungalows para alojar al entorno de Pedro Sánchez, así como un completo sistema de seguridad de última generación. Por razones de seguridad, no se especifican las fechas exactas de la estancia de Sánchez, pero diversas fuentes digitales apuntan a que todo está ya preparado para recibir al presidente.
Detalles de La Mareta
La residencia cuenta con dos baños, dos dormitorios con terraza privada y una piscina privada, alejada de miradas indiscretas, todos lujos que disfruta Pedro Sánchez, aún satisfecho con los inesperados resultados electorales del PSOE, a pesar de haber obtenido menos votos que Feijóo.
La Mareta fue diseñada con meticuloso detalle por el arquitecto Fernando Higueras y César Manrique, artista de Lanzarote a cargo de la decoración. Su nombre, La Mareta, se debe a la existencia previa de un aljibe o maceta que recogía el agua de lluvia para ser usado como bebedero de animales.
La Familia Real frecuentó La Mareta mucho antes de Pedro Sánchez. En este lugar, en el año 2000, falleció la madre de Juan Carlos mientras la Familia Real celebraba allí el Año Nuevo.