El Departamento de Acción Climática de la Generalitat ha ordenado el sacrificio de 87.000 pavos y codornices después de que el Laboratorio Nacional de referencia de Veterinaria de Algete (Madrid) haya confirmado un foco de gripe aviar del tipo H5N1 en una granja de pavos de Arbeca (Lleida), sin posibilidades de que salte a los humanos.
El secretario de Alimentación, Carmel Mòdol, y la directora general de Agricultura, Elisenda Guillaumes, han informado este mediodía en conferencia de prensa de que el martes se sacrificó un total de 9.000 pavos de la granja afectada y otros 28.000 de dos granjas ubicadas en un radio de tres kilómetros respecto del foco, del mismo propietario, se están sacrificando hoy, además de 50.000 codornices de otra explotación próxima.
También se ha inmovilizado más de 70 explotaciones de huevo y aves, ubicadas en un radio de diez kilómetros respecto al foco, en las que han comenzado las inspecciones veterinarias para saber cuál es la situación sanitaria. Entre ellas se encuentran dos mataderos.
A excepción de la granja en la que se ha declarado el foco, en las otras, hasta el momento, no se ha detectado ningún positivo.
En todos los casos, después del sacrificio de los animales se está procediendo a la desinfección de las instalaciones para «desactivar» el virus.
Todas estas medidas se levantarán cuando hayan pasado 30 días desde la limpieza y desinfección de la granja afectada, siempre que la situación sanitaria no varíe.
De igual forma, se ha prohibido la caza de aves en un radio de diez kilómetros y se mantienen los niveles de vigilancia en aves salvajes con el cuerpo de Agentes Rurales.
Las explotaciones afectadas recibirán ayudas de entre 60.000 y 19.000 euros.