La continuidad de Leo Messi en el FC Barcelona está cada vez más complicada. El argentino se ha hartado de los continuos vaivenes de la directiva culé, y les ha dicho que quiere irse de manera inmediata, acogiéndose a la cláusula de su contrato que se lo permite. A sus 33 años sigue siendo la gran referencia del fútbol mundial, por lo que cuenta con opciones en Italia, Inglaterra y, como no, Argentina.
La escandalosa humillación que los jugadores del Barça sufrieron ante el Bayern en los cuartos de final de la Champions ha sido la gota que ha colmado el vaso del argentino, que ya desde el primer momento empezó a estudiar su posible salida del club azulgrana, al que llegó con 13 años y con cuyo primer equipo debutó a los 17.
Sin embargo, ha sido la conversación con Koeman, que ha decidido emprender una purga que comienza por su gran amigo Luis Suárez la que ha hecho que decida irse.
Messi, ¿rumbo a Italia o a Inglaterra?
Entre las opciones más atractivas para Messi están las del Inter de Milán y el Manchester City. El club italiano y sus dirigentes nunca han ocultado que les gustaría fichar al ’10’ del Barcelona. Es más, el presidente ‘nerazzurro’ Massimo Moratti sigue insistiendo en que su club y su propietario tienen todos los recursos para ficharle si decide dejar la ciudad condal.
La opción del City también va ligada al potencial económico del club pero un factor clave puede ser el reencuentro de Messi con Pep Guardiola, entrenador de los ‘sky blues’, quien suma siete años de fracasos en la Champions League tras haber gastado 1.000 millones en fichajes.
También el equipo de enfrente, el Manchester United, está en serias opciones de hacerse con el argentino. Músculo financiero tienen y, sobre todo, la necesidad de un revulsivo tras otro año de fracaso que ni siquiera han paliado con la Europa League, donde cayeron en semifinales ante el Sevilla, a la postre campeón.
En cualquier caso, se trata de una operación tremendamente compleja que puede mover entre 230 y 260 millones. La complejidad reside en que Messi no tiene total libertad para salir del Barcelona cuando él quiera, sino que está atado por diferentes cláusulas de su contrato. Y segundo, por los elevados emolumentos del futbolista.
En su última renovación Messi puso la condición de poder salir libre, según se ha publicado, pero debía comunicarlo al club con un año de antelación. Es por ello que, en caso de querer salir este verano, tendrá que convencer al Barça para que negocie un precio por su traspaso con los equipos interesados. Esta es una de las grandes guerras que se abren ahora mismo.
Las cifras que se barajan pueden elevar la operación hasta los 260 millones de euros, siempre que no se vaya gratis, teniendo en cuenta el precio del traspaso, unos 120 millones, y la ficha de Messi. Esta última cantidad rondaría los 100 millones brutos al año en caso de firmar por un equipo italiano, donde los impuestos son más bajos para los futbolistas. Es por ello que el City podría tener que subir el ‘sueldo’ de Messi hasta los 130 millones para compensar la diferencia de fiscalidad del Reino Unido.
A estas cantidades hay que sumar la comisión que se lleva la familia del futbolista, que se trata de un 10% del traspaso y aumentaría la operación en 12 millones más, por lo que la salida de Messi del Barcelona dejaría una operación de entre 230 y 260 millones de euros.