Fernando Alonso afronta su carrera clave en este 2020. Las 500 Millas de Indianápolis están a la vuelta de la esquina y él ya tiene la cabeza lista para la remontada. Sale 26º, y su objetivo es ganar la prueba para tener así su ansiada Triple Corona.
«La cuestión es estar ahí, no creo que haya diferencia entre salir 7º, 11º, 21º o incluso 30º. Lo hemos visto todos los años», cuenta.
Fernando sabe que la carrera se va a decidir prácticamente al final: «Como casi todas, serán claves las últimas 30, 50 ó 60 vueltas. Las primeras 150 serán a un ritmo relajado».
«Para ganar, tenemos que ejecutar una carrera perfecta. Necesitas ritmo, adelantamientos buenos, poco consumo, acertar en las paradas y suerte con las banderas amarillas… Vamos a ir a por ello», dijo en la rueda de prensa previa a las 500 Millas de Indianápolis.
Según Alonso, el Arrow McLaren tiene «velocidad»: «Eso está ahí, y el ‘set up’ del coche para la carrera es mejor que para la clasificación. Podemos remontar, pero para ganar… Hay muchos factores, algunos están en un tu mano y otros no».
Será este el tercer intento que haga Fernando Alonso para conquistar las 500 Millas de Indianápolis. En el primero, en 2017, el asturiano estuvo peleando por la victoria hasta el final, cuando un error en su motor Honda le dejó fuera de carrera.
En el segundo, en 2019, ni tan siquiera pudo pasar el corte para participar en la carrera.
En esta ocasión, sale en el puesto 26, después de una clasificación en la que quedó más que patente que el motor Chevrolet no está hecho para las tandas cortas.