Una de las pizzas que no puede faltar nunca en la carta de un restaurante italiano es la pizza caprichosa. Su popularidad hace que esta sea una de las pizzas más solicitadas por su rica, variada y abundante composición de ingredientes.
¿Qué ingredientes lleva la pizza caprichosa? Dependiendo de la región y de la estación del año en la que nos encontremos, podremos degustar diferentes versiones adaptadas a los ingredientes autóctonos que se encuentren disponibles en ese momento. Un ejemplo de esta diversidad de ingredientes es que en Sicilia es muy común añadirle un huevo a la pizza, pero si nos vamos a algún restaurante de la costa nos podremos encontrar pizzas caprichosas que incluyen mejillones entre sus ingredientes. En otras regiones del norte del país, sin embargo, es más usual que se le añadan salchichas cortadas en rodajas.
Como podéis observar, estamos ante una pizza de lo más sorprendente y caprichosa. La versión que hoy os traigo, es una de las más fieles a la receta original, estoy segura de que también logrará cautivaros. No os quedéis sin probarla y disfrutad de esta deliciosa pizza totalmente casera. ¡Buen provecho!
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocinado: 30 minutos
- Tiempo total: 1 hora (más el tiempo de fermentación de la masa)
- Raciones: 2
- Categoría: plato principal
- Tipo de cocina: italiana
- Calorías por ración (kcal): 397
Ingredientes de la pizza caprichosa para 2 personas
Para la masa:
- 250 g de harina de trigo de todo uso
- 160 ml de agua templada
- 25 ml de aceite de oliva virgen extra
- 10 g de levadura fresca de panadero
- 4 g de sal fina
- 2 cucharadas de sémola de trigo duro
Para la cobertura:
- 1 alcachofa fresca
- 3 champiñones frescos
- 2 pizcas de sal fina
- 3 cucharadas soperas de salsa de tomate natural triturado
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharada pequeña de orégano seco
- 1 cucharada pequeña de albahaca seca
- 120 g de queso mozzarella rallado
- 100 g de jamón cocido
- 8 aceitunas negras sin hueso
- Unas hojas de albahaca fresca
Cómo hacer pizza caprichosa
Lo primero que tenemos que hacer es preparar la masa de la pizza. Para ello echamos en un bol 250 gramos de harina de trigo, 160 ml de agua templada, 20 ml de aceite de oliva virgen extra y 10 gramos de levadura fresca desmenuzada. Mezclamos hasta que se integren los ingredientes y, por último, agregamos 4 gramos de sal. Volvemos a mezclar hasta obtener una masa homogénea y un poco pegajosa, es normal. Tapamos el bol con papel film o un paño y dejamos reposar la masa durante 10 minutos.
Destapamos el bol y amasamos durante 1 minuto más. Formamos una bola con la masa, engrasamos el bol con 5 ml de aceite de oliva virgen extra y la dejamos reposar tapada con film hasta que doble su volumen. En mi caso, la masa tardó 45 minutos en duplicar su volumen, pero este tiempo es relativo por lo que te recomiendo controlar la masa cada cierto tiempo.
Mientras la masa está reposando, vamos a preparar los ingredientes de la cobertura. Pelamos 1 alcachofa, le retiramos los pétalos más fibrosos hasta quedarnos con el corazón y la cortamos por la mitad. Limpiamos 3 champiñones frescos, los pelamos y los cortamos en láminas.
En una cazuela, ponemos a hervir abundante agua con 1 pizca de sal. Cocemos la alcachofa durante 20 minutos contando desde el momento en el que el agua rompe a hervir de nuevo tras añadirla.
Transcurrido el tiempo de levado de la masa, precalentamos el horno a máxima temperatura, a 270 ℃ si nuestro horno lo permite. Ponemos papel de hornear en una bandeja de unos 40 cm de diámetro, espolvoreamos 2 cucharadas de sémola de trigo duro sobre el papel y ponemos la masa sobre él. Con las manos engrasadas, vamos estirando la masa hasta que ocupe toda la base de la bandeja. Cubrimos la superficie de la masa con 3 cucharadas de tomate natural triturado, 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra, 1 pizca de sal fina y 1 cucharada pequeña de orégano y otra de albahaca seca.
Añadimos 120 gramos de mozzarella rallada, de forma que cubra toda la base de la pizza. Yo utilizo este tipo de mozzarella porque, a diferencia de la mozzarella de bola, esta no suelta nada de suero durante la cocción.
Continuamos añadiendo los demás ingredientes de la pizza: 100 gramos de jamón cocido cortado en cuadrados, la alcachofa que cocimos cortada en láminas, los champiñones laminados, 8 aceitunas negras sin hueso y un hilo de aceite de oliva virgen extra por toda la superficie.
Introducimos la pizza en la rejilla más baja del horno y la horneamos durante 10 o 12 minutos. Debemos vigilarla porque, en cuanto los bordes de la pizza comiencen a dorarse significará que ya está hecha. Sacamos la pizza del horno, la decoramos con unas hojas de albahaca fresca y la servimos inmediatamente para disfrutarla como debe de ser, recién hecha. ¡Buon appetito!
Resumen fácil de preparación
- Para la masa: mezcla en un bol la harina con el agua, el aceite y la levadura fresca. Añade la sal y vuelve a mezclar. Tapa el bol y deja reposar 10 minutos
- Amasa durante 1 minuto y forma una bola, engrasa el bol y deja levar la masa durante 45 minutos o hasta que doble su volumen
- Limpia la alcachofa, retira los pétalos más externos y córtala por la mitad. Pela los champiñones y lamínalos
- Cuece la alcachofa en agua con sal durante 20 minutos desde que rompa a hervir
- Precalienta el horno a 270 ℃, cubre una bandeja de 40 cm de diámetro con papel de horno, espolvorea sémola y estira la masa. Añade tomate triturado, un hilo de aceite, orégano y albahaca en polvo
- Cubre toda la superficie con mozzarella rallada
- Agrega jamón cocido en cuadrados, la alcachofa y los champiñones laminados, las aceitunas negras sin hueso y un hilo de aceite de oliva
- Hornea la pizza en la rejilla más baja del horno durante 10 o 12 minutos o hasta que los bordes se doren. Saca la pizza, decora con albahaca y sírvela inmediatamente