El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, ha apoyado el plan de varios gobiernos —entre ellos el de España— de gravar las «inmorales» ganancias extraordinarias de las empresas petroleras y gasistas que se han visto beneficiadas de la actual crisis energética con el fin de destinar los nuevos ingresos a fondos a los más necesitados.
«Es inmoral que las empresas de petróleo y gas obtengan ganancias récord de esta crisis energética a costa de las personas y comunidades más pobres y a un costo enorme para el clima (…) Insto a todos los Gobiernos a gravar estas ganancias excesivas y utilizar los fondos para apoyar a las personas más vulnerables en estos tiempos difíciles», ha dicho este miércoles Guterres en una conferencia celebrada en la sede de Naciones Unidas.
En la presentación del informe Grupo de Respuesta a la Crisis Global sobre la energía, el secretario general de la ONU ha detallado que las compañías energéticas más grandes han recaudado durante el primer trimestre de este año se cerca de 98.000 millones de euros (100.000 millones de dólares).
Por este motivo, ha recomendado a «las personas de todo el mundo» a enviar «un mensaje claro» a la industria de los combustibles fósiles y a sus financiadores, advirtiéndole de que «esta codicia grotesca está castigando a las personas más pobres y vulnerables, mientras destruye nuestro único hogar común, el planeta».
La ONU recomienda racionar la energía
Por otra parte, dentro de las recomendaciones del informe sobre energía para gestionar la actual crisis energética, Guterres ha señalado que todos los países —especialmente los países desarrollados— deben gestionar su demanda de energía. «La conservación de energía, la promoción del transporte público y las soluciones basadas en la naturaleza son componentes esenciales de eso», ha remarcado.
Asimismo, ha subrayado la importancia de acelerar la transición a las energías renovables, argumentando que en la mayoría de los casos son más baratas que los combustibles fósiles.
En este sentido, el secretario general de la ONU ha lanzado varias propuestas para «desencadenar la revolución de las energías renovables», un plan que pasaría porque los gobiernos amplíen y diversifiquen sus cadenas de materias primas y tecnologías de energías renovables, que conviertan en bienes públicos tecnologías de almacenamiento, que eliminen trámites burocráticos al proceso, y cambien los subsidios a los combustibles fósiles para apoyar a los hogares vulnerables con inversiones en energías renovables.
Por último, Guterres ha asegurado que, para que se avance en la transición energética, es importante que se aumente la financiación privada a proyectos que apuesten por alcanzar emisiones cero.