estafas bancarias de 47 personas ha sido desarticulado. Suplantó la identidad de más de 200 víctimas y consiguió dos millones y medio de euros.
Para conseguirlo, obtenían los DNI en páginas web de compraventa de segunda mano o mediante hurtos. Una vez conseguidos, los utilizaban para conseguir efectivos, abrir cuentas o solicitar créditos.
Para ello modificaban la información de contacto del cliente: el teléfono y el correo electrónico. Acudían a las sucursales usurpando la identidad de las víctimas ocultando el rostro con mascarillas o disfraces.
En el caso de que las cuentas de las víctimas no tuvieran un saldo suficiente, utilizaban los datos robados de los DNI para alquilar coches, pagar habitaciones de hotel, comprar billetes de tren o avión, contratar líneas de teléfono o abrir cuentas corrientes.
La red tenía una estructura piramidal y sus miembros de alto grado de especialización y un reparto claro de las tareas. Se movían por toda España, aunque estaban afincados en Barcelona.
Se dividían en pequeños grupos formados por un jefe y que disponía de autonomía para ordenar el trabajo de los ‘suplantadores’. Estos eran los que acudían a las entidades bancarias.
47 detenciones y 28 registros
La operación policial se saldó 47 detenciones y 28 registros. En ellos se ha intervenido documentación sobre las identidades usurpadas.
También se ha intervenido una pequeña plantación de marihuana, 51 DNI físicos, 18 armas, 60 móviles, 120 tarjetas de telefonía, 5.800 euros en efectivo, joyas, cuatro vehículos de alta gama y hardware para almacenar criptomonedas.