no supere los 1,20 euros para garantizar la igualdad de condiciones. México ha sido el ganador del Mundial de Tapas.
Los hemos visto presentar sus creaciones ante el jurado y a los grandes chefs valorando su estética, su sabor y su creatividad. Pero ahora es el turno del veredicto del público en Valladolid y las críticas son muy positivas. Entre los adjetivos más repetidos por los comensales «espectacular», buenísimo» o «sorprendente».
Una tortilla inflada crujiente y de una segunda parte que es un cerdo marinado y asado ha sido el primer premio del concurso nacional. Lleva un punto de guacamole, otro de mayonesa de chile habanero y cebolla encurtida. Para finalizar, se quema la hoja que envuelve la mazorca de maíz.
Los sabores más tradicionales de la tierra camuflados en un trampantojo 2.0. Sus creadores aseguran que «es un homenaje al mundo de la gastronomía y el vino». Como dicen, al verlo, todos se preguntan dónde está el pincho, pero el secreto es que se esconde en el corcho de la botella. En este caso, es un guiso de cochinillo marinado en vino y envuelto en una lámina de patata que se ha llevado el segundo premio del concurso mundial.
Mar y montaña con sabores mallorquines para devorar en dos bocados o un crujiente de rabo de toro para mojar en su propio jugo es la esencia de la alta cocina en miniatura que ha vuelto a convertir a Valladolid en la capital mundial del Pincho y la Tapa.