situado al sur de Ávila que puede visitarse. Las cuevas tienen una profundidad de 50 metros y la longitud del recorrido es de 1.000 metros. Se trata de una de las formaciones naturales más impresionantes de la Península.
Su encuentro fue accidental
Las cuevas del Águila fueron descubiertas de manera accidental el 24 de diciembre de 1963 cuando cinco jóvenes, que se encontraban por la zona del Cerro de Romperropas o Cerro del Águila, vieron que salía vapor por un agujero. El vapor de agua se producía por la diferencia de temperatura en el interior, unos 17 grados centígrados, y el frío del exterior.
500 millones de años de historia
La cuevas están formadas por calizas Paleozoicas y, aunque se desconoce cuándo se formaron las del Águila, se calcula que tienen entre 500.000 a un millón de años de historia.
La visita a las cuevas se realiza a pie dado que el recorrido está pavimentado para los visitantes, además, desde la página web que organiza la actividad se aconseja utilizar zapato apropiado porque la humedad es del 100% y la temperatura se mantiene a 17 grados aproximadamente durante todo el año.
Cómo llegar y el recorrido turístico
El precio de las entradas es de 8 euros, aunque el pase es gratuito para todos los menores de 5 años de edad y el recorrido dura unos 40 minutos a pie. Las entradas pueden comprarse allí en taquilla o en la página web de la organizadora.
Para llegar en coche hay que dirigirse a Arenas de San Pedro, al sur de Ávila. Desde Madrid es necesario tomar la autovía A-5 en dirección Badajoz y a la altura de la salida 123, en Talavera de la Reina, seguir por la N-502 hasta Ramacastañas. Un buen plan de verano ante el sofocante calor.