China ha presentado ‘el no va más’ en lo que a drones se refiere. Su última creación es un dron submarino que tiene forma de pez, para ser exactos, tiene la misma apariencia que el pez arowana, una especie de agua dulce muy conocida y protegida a nivel internacional.
El fin de este nuevo dron en principio es para que sirva de ayuda a la investigación científica, en concreto, en el estudio de la biología marina, pero ya se habla de la posibilidad de utilizarlo con fines militares en labores de espionaje u otras actividades, según recoge el medio digital Oddity Central.
Ocho horas de autonomía
La empresa china Boya Gongdaoha sido la que se ha encargado de crear este dron que se asemajera a un pez en apariencia, pero también en movimientos. Cuenta también con un gran número de sensores y tecnología de control de visión global y tiene una autonomía cercana a las ocho horas.
En el vídeo se puede observar como el dispositivo nada con completa normalidad. Incluso cuando se acerca una pared es capaz de darse la vuelta y nadar en otra dirección sin llegar a chocarse con ella. Sus movimientos son muy similares a los de un pez normal, casi perfectos, por lo que a priori nadie puede percatarse de que es un robot.
Objetivo científico
El dron con forma de pez se presentó la Exposición Militar de Pekín desarrollada el pasado mes de junio en la capital de china y fue capaz de eclipsar al resto de dispositivos mostrados entonces.
En un primer momento, su fin está orientado a la investigación científica y al estudio de la biología marina, pero ciertas voces ya hablar de un objetivo militar, concretamente en el uso de este dron para el espionaje. Esto se debe al uso de la Inteligencia Artificial que está presente en todo el dispositivo, por lo que no se descarta su utilización en el ámbito militar.