campaña de la renta 2020 era el 30 de junio, día en el que acababa el plazo para presentarla. Precisamente, durante esas últimas 24 horas se han entregado más declaraciones que en toda la campaña.
Algunos contribuyentes han esperado hasta el último momento por miedo, incluidos los afectados por los ERTES, que tanto se han producido en este último año. Pero, ¿cuáles serán las consecuencias para aquellos que están ya fuera de plazo? Esto dependerá de dos factores.
En caso de que salga a devolver
Si la declaración de la renta te ha salido a devolver, la sanción en esta coyuntura variará en función de que Hacienda nos lo notifique o no. Esto es, si presentamos la declaración de la renta antes de que Hacienda nos avise, será de 100 euros. Pero si lo hacemos después, ascenderá a 200 euros.
En el caso de que salga a pagar
Si nos encontramos en esta tesitura, también existen dos posibles sanciones. Antes de que Hacienda nos los notifique puede variar entre el 5% y el 20%. Si la demora es en un plazo menor a tres meses, el recargo será del 5%. En un período de tiempo de entre tres y seis meses se aplicará el 10%. Entre seis y doce meses, el 15%. Mientras que, a partir de los doce meses, será un 20% de recargo. Si nos encontramos en el periodo de tiempo en el que Hacienda ya nos ha avisado, se nos impondrá un recargo que puede ir del 50% al 150% de la cantidad pagada.
De estas consecuencias podemos deducir que, dado el caso de que tengamos que entregar la declaración de la renta fuera de plazo, siempre será mejor hacerlo antes de que Hacienda lo notifique. Así es posible que la sanción se reduzca de manera considerable.