A los ciudadanos de Oviedo además de conocerlos como ovetenses se les llama también carbayones. De ahí el nombre de los pasteles que vamos a hacer a continuación. Es una receta sencilla, aunque algo laboriosa pero que merece la pena pues el resultado es delicioso. Los carbayones son pasteles que se pueden tomar a cualquier hora del día y que acompañan estupendamente un café o un té. El origen de estos pasteles data de 1920-1923 cuando Don José de Blas, dueño de la confitería Camilo de Blas, le encarga a su maestro pastelero un dulce que representara a la ciudad de Oviedo para darlo a conocer en la I Feria de Muestras de Asturias que tuvo lugar en Gijón en 1924. Desde entonces es uno de los más conocidos de la gastronomía asturiana, un pastel jugoso y crujiente a la vez. Hará las delicias de los más golosos.
Información de la receta
- Tiempo de preparación: 30 minutos
- Tiempo de cocción: 1 hora
- Tiempo total: 1 hora y 30 minutos
- Raciones: 4 (12 unidades)
- Categoría: repostería
- Tipo de cocina: asturiana
- Calorías: 310 kcal por cada 100 g
Ingredientes de los carbayones para 4 personas
- 125 g de harina de almendras (100% almendra molida)
- 125 g de azúcar glas (o azúcar blanca triturada)
- 1 huevo
- 2 yemas de huevo
- Limón rallado
- 15 ml de brandy
Para el baño de yema:
- 4 yemas
- 100 g de azúcar
- 100 ml de agua
Para el glaseado:
- 1 clara de huevo
- 200 g de azúcar glas
- 3-4 gotas de limón
Cómo hacer los carbayones
Para hacer los carbayones lo primero que tenemos que dejar preparado es el relleno de almendra. En un robot de cocina o con ayuda de una batidora mezclamos todos los ingredientes para hacer el relleno de almendra que llevará el carbayón (la harina de almendra, los 125 g de azúcar, el huevo y las yemas, la pizca de piel de limón y el brandy). Lo trituramos todo y lo metemos en una manga pastelera.
Con la plancha de hojaldre vamos a forrar los moldes de aguja para hacer los carbayones. Haremos los carbayones en dos tandas de 6. Utilizaremos media plancha de hojaldre para cada tanda. Es importante pinchar la base de hojaldre de los carbayones antes de rellenar para hornear.
Con la manga pastelera rellenamos el interior de los moldes de aguja que hemos forrado con la masa de hojaldre. No los llenamos a tope porque sube al hornearse y corremos el riesgo de que se nos desborden demasiado. Precalentamos el horno a 150 ºC.
Metemos los carbayones a hornear en la parte inferior del horno a 150 ºC con calor arriba y abajo durante 30 minutos.
Cuando estén horneados dejamos que se templen un poco y desmoldamos con cuidado, colocándolos sobre una rejilla para que se terminen de enfriar y no pierdan la textura crujiente del hojaldre.
Es el momento de preparar la crema de yema con la que daremos el primer baño a los carbayones. En un cazo ponemos a calentar el agua y el azúcar hasta que se haga un almíbar a punto de hilo. Cuidado de no quemarnos con el almíbar porque es doloroso. En un bol ponemos las yemas y las batimos un poco. Vamos añadiendo el almíbar a las yemas poquito a poco, al hilo y removiendo de continuo hasta que terminemos de añadirlo todo. Volvemos a pasar la mezcla al cazo y calentamos a fuego bajo dando vueltas hasta que espese un poco y tome textura cremosa con cuidado de que no se nos queme.
Bañamos los carbayones con la crema de yemas y dejamos que se sequen.
El siguiente paso es preparar el glaseado que será el segundo baño que daremos a los carbayones. En un robot de cocina o con ayuda de una batidora mezclamos la clara de huevo con el azúcar y las gotas de limón hasta obtener una mezcla blanca como una crema brillante.
Una vez han secado los carbayones del baño de crema de yemas los napamos de nuevo con la glasa blanca.
Dejamos que se sequen unos minutos y los colocamos en las cápsulas de papel para presentarlos. Podemos acompañar los carbayones de un café o un té y disfrutar de ellos en el desayuno, como postre o entre horas. Al corte se diferencian las capas que lo componen. La base de hojaldre, el relleno de almendras y los baños de crema de yemas y de glaseado.
Resumen fácil de preparación
- Preparar el relleno de almendra de los carbayones
- Forrar los moldes de aguja con la masa de hojaldre y pinchar la base
- Rellenar los moldes con el relleno de almendra y hornear a 150 ºC con calor arriba y abajo en la balda inferior durante 30 minutos
- Desmoldar y dejar enfriar los carbayones
- Preparar la crema de yemas que será el primer baño de los carbayones
- Bañar los carbayones sobre una rejilla o mojar la parte superior en la crema de yemas
- Dejar secar el primer baño de los carbayones y mientras preparar la glasa para el segundo baño
- Una vez seco el baño de crema de yemas bañamos los carbayones con la glasa blanca y dejamos secar de nuevo
- Una vez han secado los carbayones de los dos baños los metemos en cápsulas de papel para presentarlos
- Acompañar los carbayones de un café o de un té o tomarlos como postre