Según recoge El Caso, una chica de 27 años de Mallorca ha denunciado a tres hombres, dos de ellos tenientes en activo de la Guardia Civil, por, presuntamente, haber abusado sexualmente de ella después de haberla drogado. El juzgado de instrucción 8 de Madrid, según ha adelantado ElDiario.es, lo está investigando por orden de la Fiscalía.
Según la información que avanza el diario citado, la chica pasó un fin de semana en Madrid y cuando llegó a casa de madrugada no recordaba cómo había ido la noche y tenía las bragas rotas. Más tarde, y cuando ya había vuelto a Mallorca, fue recordando cosas, hasta que pudo atar cabos y presentó la denuncia por abusos sexuales.
Una nublada noche de marzo de 2018 en Madrid
Los hechos pasaron la noche del 11 al 12 de marzo de 2018. Según el relato que hace la chica en la denuncia, cuando salían de un bar del barrio de la Latina de Madrid, tres hombres le ofrecieron beber algo.
La joven se quedó con los tres hombres y su amigo, el propietario de la casa donde pasaba la noche en Madrid, se fue a dormir. La chica siguió con los tres chicos, fueron a otro bar y allí ella se tomó una cerveza: es lo último que recuerda de aquella noche, según explicó a la policía.
Burundanga para anular su voluntad
Tiene algunos flashes de la noche. Una discoteca, un taxi y ella en la cama con los tres hombres sin camiseta, que le arrancaron las medias. No lo recuerda por orden ni tampoco con claridad, según detalla el sumario del caso al cual ha tenido acceso ElDiario.es. La chica cuando empezó a recordar cosas denunció los hechos a la Policía Nacional.
La chica asegura que los tres hombres la drogaron para después abusar sexualmente de ella. Según el relato que hace ella, todo apunta al uso de burundanga, una droga que anula las voluntades de la persona y que permite un abuso sin fuerza. La chica se despertó en casa de su amigo con dolores vaginales, compatibles con una violación.
Su amigo también asegura, cuando fue citado a declarar, que la chica le contestó con mensajes de texto que no se entendían cuando le preguntó dónde estaba y que llegó a casa desorientada y con mucho dolor de cabeza y con las bragas rotas.
Se los encontró en una discoteca de Palma
Aunque la investigación seguía su curso, el azar hizo que la chica se encontrara con los agresores en una discoteca de Palma. La chica llamó a la policía y una patrulla los identificó y quedaron imputados por un presunto delito de abusos sexuales.
Niegan la agresión sexual
Fue aquí cuando se supo que dos de ellos eran agentes de la Guardia Civil, con el rango de tenientes. Son tres jóvenes, de 26 años: Javier V., Guillermo P. y Óscar P. Uno de ellos está destinado en Inca, en las Baleares, y el otro en Ferrol, en Galicia.
La investigación de la policía y del juez tendrá que servir para aclarar los hechos. Ellos tres, y según también se desprende de su declaración ante los investigadores de la Policía Nacional, niegan los hechos y mantienen que las relaciones sexuales con la chica fueron consentidas. Los tres aseguran que todos mantuvieron sexo oral con la chica y sólo uno de ellos, el que no es agente de la Guardia Civil, mantuvo relaciones sexuales con penetración con la chica, la víctima.