El brote de Covid-19 que obligó a que regresara a España la semana pasada afecta ya a 35 de los 57 tripulantes. El Hespérides iba a dar servicio a las dos bases españolas, que abrirán igualmente el 21 de enero
Un brote de coronavirus ha obligado a suspender definitivamente el viaje del buque oceanográfico Hespérides a la Antártida. Son ya 35 los 57 miembros de la tripulación los que han contraído la infección, lo que ha llevado al Ministerio de Ciencia e Innovación y al Ministerio de Defensa a cancelar la travesía del barco que debía dar apoyo a los dos bases españolas antárticas durante esta campaña.
Pese a las cuarentenas previas y a las pruebas PCR que se hicieron a todos los tripulantes antes de partir de Cartagena el pasado 30 de diciembre para intentar prever una situación como ésta, a las pocas horas de navegación dos personas mostraron síntomas compatibles con el coronavirus. El diagnóstico fue confirmado poco después con un test rápido.
Las pruebas se ampliaron a otros miembros de la tripulación y encontraron otros dos casos, por lo que el barco, que tendría que haber llegado a la Antártida el 30 de enero, dio la vuelta y puso rumbo a las Islas Canarias. Desde el 4 de enero, el Hespérides está atracado en el puerto de Las Palmas de Gran Canaria, a la espera de intentar resolver la situación y de que la Armada decidiera qué hacer finalmente con la expedición.
Había esperanzas de que tras una nueva cuarentena de la tripulación, el buque pudiera volver a zarpar. Pero de los 10 casos que había la semana pasada se ha subido a 35. Los miembros de la expedición que han dado positivo pero no tienen síntomas están aislados en sus camarotes en el barco, mientras que los que presentan síntomas se encuentran en un recinto, fuera del buque.
Pese a este grave revés para la campaña de este año, de momento siguen los planes para abrir el próximo 21 de enero las dos bases españolas, la Juan Carlos I y la Gabriel de Castilla, pues el personal que se encargará de ponerlas en marcha va a llegar al continente helado a bordo de otro buque, el Sarmiento de Gamboa, que partió de Vigo el 16 de diciembre.
UNA CAMPAÑA MÁS CORTA Y CON MENOS CIENCIA
Tal y como explica en conversación telefónica Antonio Quesada, secretario técnico del Comité Polar Español, el barco español llegará a Punta Arenas (Chile) pasado mañana para recoger a los españoles que se han desplazado hasta esta localidad sudamericana en avión y que desde hace dos semanas guardan cuarentena en sus hoteles para evitar contraer el coronavirus.
«Sin el Hespérides, la campaña va a tener que ser mucho más corta y con menos personal. Durará treinta y tantos días en lugar de los 80 o 90 días que teníamos previsto», señala Quesada.
En vez de las 150 personas que iban a estar en las dos estaciones españolas finalmente viajarán unas 40: «Hemos rebajado mucho la ciencia que vamos a poder hacer aunque aprovecharemos para hacer la máxima que podamos, y sobre todo poder mantener las series históricas de datos y realizar el mantenimiento de las dos estaciones», detalla Quesada.