Instituciones Penitenciarias mantiene al marido de la Infanta Cristina en segundo grado (la clasificación ordinaria), pero aplicándole el artículo 100.2 del reglamento penitenciario
Iñaki Urdangarin, en la cárcel por el caso Nóos, cumplirá el resto de su condena en un Centro de Inserción Social, podrá ir a casa un fin de semana al mes y trabajará de lunes a viernes como voluntario en el Hogar Don Orione, siempre y cuando se someta al programa de reinserción para condenados por delitos económicos.
Así lo ha acordado la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias después de estudiar la propuesta de la Junta de Tratamiento de la cárcel de Brieva (Ávila), donde está recluido desde junio de 2018, para que el cuñado del Rey Felipe VI accediera al tercer grado penitenciario o régimen abierto.
Sin embargo, según han indicado a Efe fuentes penitenciarias, la Secretaría General ha decidido mantener al preso en segundo grado (la clasificación ordinaria), pero aplicándole el artículo 100.2 del reglamento penitenciario.
Un precepto que permite al recluso salir a trabajar o a hacer voluntariado, pero deberá regresar al centro para pernoctar.
Las fuentes han precisado que Urdangarin, condenado a 5 años y 10 meses de cárcel por corrupción en el caso Nóos, será trasladado al Centro de Inserción Social (CIS) de Alcalá de Henares (Madrid), donde pernoctará cada día. Eso sí, en lugar de los tres días a la semana que ahora acude al Hogar Don Orione, en la localidad madrileña de Pozuelo de Alarcón, para hacer labores de voluntariado, lo hará cinco, de lunes a viernes.
Un fin de semana al mes podrá irse a su casa, según la resolución de Instituciones Penitenciarias que, no obstante, condiciona esta nueva situación a que Urdangarin se someta al programa de reinserción que Prisiones ha puesto en marcha para condenados por delitos económicos.