El número de personas atendidas por el Banco de Alimentos de Barcelona ya ha superado el máximo histórico que registró durante la crisis económica de 2008, según han alertado este viernes sus responsables, que recuerdan que a principios de marzo daban alimentos a 114.000 personas y ahora ayudan a cerca de 160.000. También ha aumentado el número de entidades sociales que necesitan alimentos para repartir, que han pasado de 302 a 379 en solo dos meses, debido a la puesta en marcha de nuevas iniciativas comunitarias para dar respuesta a la emergencia social generada por la crisis sanitaria.
Desde el pasado 14 de marzo han repartido más de 4.298 toneladas de alimentos a través de diferentes programas. Para garantizar el aprovisionamiento continuo de alimentos y su distribución, han puesto en marcha diferentes campañas para que la ciudadanía pueda colaborar de la forma más segura y eficiente, haciendo donaciones en línea. Entre ellas destacan la impulsada por Caixabank y la Fundación Bancaria “la Caixa”, bajo el lema Ningún hogar sin alimentos. También cadenas de distribución como Lidl, BonÀrea, Caprabo o El Corte Inglés están llevando a cabo campañas virtuales de recolecta de alimentos, invitando a sus clientes a hacer una aportación económica o redondear el importe de su compra.
El Banco de Alimentos también tiene su propia campaña “Emergencia COVID-19”. Los responsables del Banco de Alimentos consideran que la reciente aprobación del Ingreso Mínimo Vital (IMV) por parte del Gobierno el pasado viernes 29 de mayo, y que está previsto que llegue a 850.000 hogares en situación de pobreza en toda España, debería contribuir a reducir el número de personas en situación de pobreza. En estos momentos, la tasa de pobreza en España, según el último informe AROPE, es del 26,1 % de la población, 12,3 millones de personas.