Virgen de la Paz de Villarta de San Juan
Virgen de la Paz de Villarta de San Juan

Villarta de San Juan ha vivido este año su jornada más emblemática de Las Paces, una festividad centenaria que destaca como una de las más singulares de Castilla-La Mancha. Durante más de cinco horas, las 28 peñas coheteras del municipio lanzaron decenas de miles de cohetes sin descanso, llenando el cielo de pólvora y emoción, en una tradición que combina fe, devoción y ruido ensordecedor.

Procesión y fervor: el corazón de Las Paces

El día comenzó con una solemne función religiosa, tras la cual, a la una de la tarde, la Virgen de la Paz salió de su templo entre vítores y aplausos para recorrer las calles de Villarta. Escoltada por los fieles y por las peñas coheteras, la imagen avanzó mientras los cohetes resonaban en una demostración única de fervor.

El olor a pólvora y el sonido de las explosiones marcaron el tono de esta tradición centenaria, que convierte a Villarta en el epicentro de una celebración donde la pólvora se transforma en expresión de fe y pasión.

‘Operación 2.000’: el momento más esperado

El momento cumbre de la festividad llegó a las tres y media de la tarde, cuando desde el mirador de la iglesia de San Juan, conocida como la ‘iglesia vieja’, se ejecutó la emblemática ‘Operación 2.000’. En esta espectacular tradición, 2.000 docenas de cohetes estallaron casi simultáneamente, generando un estruendo ensordecedor que hizo vibrar cada rincón de Villarta y emocionó a vecinos y visitantes.

La explosión conjunta no solo simboliza la unidad de un pueblo que celebra su identidad, sino que también atrae cada año a numerosos curiosos que acuden a presenciar este evento único.

La tradición se renueva

Tras el clímax de la jornada, la Virgen de la Paz regresó a su templo, donde descansará hasta el próximo año. Pero antes, se celebró la tradicional subasta que decide quién tendrá el honor de portarla a hombros en 2026, renovando un ritual que une a los villarteros y perpetúa una costumbre profundamente arraigada en la identidad del municipio.

Hacia el reconocimiento como Bien de Interés Cultural

La alcaldesa de Villarta de San Juan, Irene Ruiz, destacó durante el evento que Las Paces están un paso más cerca de alcanzar un reconocimiento aún mayor, gracias a la propuesta de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha para declararlas Bien de Interés Cultural (BIC) en la categoría de bien inmaterial.

«Con este reconocimiento, estamos sentando las bases para preservar y potenciar una tradición que nos define como pueblo y que merece ocupar un lugar destacado en el patrimonio cultural de nuestra región», afirmó la alcaldesa.

Las Paces: una tradición que trasciende generaciones

Con cada edición, Las Paces no solo consolidan su valor histórico y cultural, sino que también refuerzan el espíritu de unidad y orgullo de Villarta de San Juan. Esta festividad, marcada por el ruido ensordecedor de miles de cohetes y la devoción inquebrantable de sus habitantes, se erige como un evento único que trasciende generaciones y posiciona a Villarta como un referente de las tradiciones populares de Castilla-La Mancha.

La declaración de Bien de Interés Cultural podría ser el impulso definitivo para que esta celebración trascienda aún más allá de las fronteras regionales, atrayendo a más visitantes y asegurando su preservación para el futuro.