Max Verstappen conquistado su undécima victoria de la temporada en el Gran Premio de Italia y ha dado un paso más hacia su segundo título. Un jarro de agua fría para los tifosi de Ferrari, que han asistido impotentes a otra exhibición de fuerza por parte de Red Bull y el líder del campeonato, que llegará a Singapur con 116 puntos de ventaja.
Para mayor ‘bajón’, la carrera ha terminado con el coche de seguridad, restando cualquier atisbo de espectáculo final. Leclerc ha tenido que conformarse con el segundo puesto del podio, al que también ha subido George Russell, tercero.
La impresionante remontada de Carlos Sainz desde el fondo de la parrilla no ha tenido recompensa y el madrileño ha terminado cuarto, sin poder disputarle el podio a Russell. Hamilton, que ha arrancado 19º, ha completado el ‘top cinco’. Peor suerte ha corrido Fernando Alonso, que ha tenido que abandonar y ha visto interrumpida su racha de diez carreras consecutivas en los puntos.
Remontada ‘express’ de Verstappen
Leclerc ha salido con muchísima presión sobre sus espaldas, espoleado por los tifosi pero también consciente de Max Verstappen se le echaría encima en pocos minutos. La penalización había relegado al líder del Mundial a la séptima plaza de parrilla, pese a las protestas de Red Bull que, reglamento en mano, reclamó el cuarto puesto de salida. Pero para un piloto en estado de gracia y que tiene encarrilada su segunda corona, nada de eso era un impedimento.
Russell, muy agresivo cuando se han apagado los semáforos, ha puesto contra las cuerdas a Leclerc, que ha defendido la pole con mucho oficio. Pero en solo dos vueltas, Verstappen ha dado cuenta de Ricciardo para situarse tercero y en tres más ha superado como un ‘misil’ a Russell para ponerse a la estela de Leclerc hasta aparecer en el retrovisor del monegasco a golpe de vuelta rápida.
No todo eran buenas noticias en el garaje de Red Bull. Pérez, que de salida se había tocado con Sainz, ha tenido que entrar con una intensa humareda, aunque ha podido volver a la pista en última posición. Carlos, en una espectacular cabalgada desde la 18ª posición de parrilla, ha llegado al ‘top cinco’ en apenas doce vueltas, superando, entre otros, a Fernando Alonso, que rodaba octavo.
SAINZ, LANZADO
Ferrari ha aprovechado el coche de seguridad virtual para llamar a box a Leclerc, que se ha reincorporado con medios en tercera posición, mientras Verstappen y Russell, con blandos, han seguido en pista optando por una estrategia opuesta y el neerlandés ha pasado a comandar la carrera. Las gradas de Monza, mientras tanto, rugían celebrando el soberbio adelantamiento de Sainz a Ricciardo para ascender al cuarto puesto, justo detrás de su compañero, que ‘volaba’ con el F1-75.
Cuando Verstappen ha efectuado su parada, para Leclerc ha comenzado una lucha de supervivencia, con trece vueltas ya en sus neumáticos y el campeón de Red Bull con gomas nuevas, preparando su ataque, a diez segundos de distancia y con media carrera por delante.
FIN A LA RACHA DE ALONSO
Fernando Alonso ha tenido que retirarse en la vuelta 34 con problemas en su coche. Al mismo tiempo, Sainz ha efectuado su parada, esta vez impecable tras el desastre de sus mecánicos en Zandvoort, y Ferrari ha sorprendido al llamar por segunda vez a Leclerc, confirmando una estrategia a dos paradas para intentar llegar al final con una oportunidad sobre Verstappen.
Si las remontadas de Verstappen y Sainz han resultado efectivas, no menos espectacular ha sido la protagonizada por Lewis Hamilton, que ha salido 19º en parrilla por recurrir al quinto motor Mercedes y ha afrontado el desenlace de la carrera en Monza entre los seis primeros y con opciones de pelear por el podio. También Pérez se ha recuperado de su penalización inicial y del fallo técnico posterior.
GOLPE DE EFECTO FINAL
Leclec parecía haber tirado la toalla, con 16 segundos de diferencia respecto a Verstappen a falta de cuatro vueltas. Pero el McLaren de Ricciardo se ha parado por una avería, provocando un coche de seguridad virtual que ha dado parada libre y dejaba a Max a expensas de su rival. Sin embargo la grúa se ha retrasado tanto que ha impedido un final a muerte.
Ni la buena gestión de la carrera del muro de Ferrari ni todo el esfuerzo de Leclerc han servido para evitar una nueva exhibición de Verstappen, que ha sumado su undécima victoria de la temporada y ya tiene medio título en el bolsillo. A falta de seis grandes premios el neerlandés dispone de 116 puntos de renta sobre Leclerc y ya puede sacar la calculadora para estudiar en qué circuito puede proclamarse campeón del mundo por segundo año consecutivo.