Un hombre ha reaparecido cinco años después de que la policía le hubiera dado oficialmente por muerto creyendo que había sido asesinado. El hombre llevaba todo este tiempo viviendo en el bosque.
Todos los indicios apuntaban al asesinato
En 2015 Ricardas Puisys tenía 35 años cuando desapareció. Durante todo este tiempo la policía estaba convencida que había sido asesinado. Todos los indicios apuntaban a ello.
Ricardas había llegado hacía poco a Inglaterra. De nacionalidad lituana, había dejado en su país a su madre. Tenía una hermana viviendo en Alemania y unos primos en Irlanda. Nadie más. En el Reino Unido se instaló en Chatteris, una localidad de poco más de 10.000 habitantes, en el condado de Cambridgeshire, en el corazón de la isla, donde reside una pequeña comunidad lituana. Creyó que ahí las cosas le serían un poco más fáciles.
Un trabajado poco cualificado
Trabajador poco cualificado y con un conocimiento limitadísimo del inglés, pronto cayó en manos de empresarios sin escrúpulos y redes mafiosas. Fue, en definitiva, víctima de la esclavitud moderna.
Ricardas fue visto por última vez con vida el sábado 26 de septiembre de 2015 saliendo de Nightlayer Leek Company, una empresa de comida preparada en la que había encontrado un puesto de trabajo relativamente decente. Al día siguiente ya no se presentó. Unas semanas más tarde se encontró su documentaciónen Wisbech, una ciudad cercana a Chatteris.
Durante años la policía inglesa creyó que Ricardas había sido asesinado
La policía estaba convencida de que lo habían asesinado. De hecho, en diciembre de 2015, arrestaron a un sospechoso. Lo dejaron libre por falta de pruebas. Volvió a suceder lo mismo con un segundo sospechoso en 2018.
La pista de Facebook
El caso de Ricardas dio un giro de 180 grados en agosto de 2018 cuando alguien abrió un perfil de Facebook con su nombre y diversas fotos suyas. En los siguientes meses, la cuenta sumó 69 amistades, todos ellos pertenecientes al círculo del desaparecido. El caso se aclaró definitivamente a inicios del pasado mes de junio cuando un testigo aseguró haberlo visto andando por un bosque.
A partir de las coordenadas ofrecidas por aquel testigo la policía inició su búsqueda pero la búsqueda fue infructuosa… hasta la semana pasada cuando finalmente lo descubrieron viviendo en una zona boscosa de Wisbech. Ahora la policía trata de dilucidar los motivos de su huida de la sociedad. Si fue una decisión propia o fue por miedo a alguna red de explotación laboral.