La sana alimentación es una de las claves fundamentales para prevenir las enfermedades cardíacas. Seguir una dieta saludable reduce el riesgo de padecerlas a quienes están sanos, y disminuye las posibilidades de infarto para quienes ya son hipertensos. En consecuencia, un estudio destaca en especial la inclusión de ciertos tipos de pescados en las mencionadas dietas.
El análisis fue realizado por científicos de la Universidad McMaster. Tomaron en cuenta otros estudios que se han realizado, en torno a la alimentación de los enfermos cardíacos. Encontraron que, consumir pescados como el salmón, atún, trucha o sardinas tiene resultados beneficiosos para la actividad cardíaca.
En detalle, explican que la clave está en los ácidos grasos de omega-3 que contienen este tipo de pescados. Sostienen que estos fueron relacionados con la reducción drástica de un ataque cardíaco o un accidente cerebrovascular.
Principales beneficiados de añadir pescados a las dietas
Según lo expresa el estudio, los principales beneficiados de añadir estos alimentos a sus dietas, son quienes ya sufrieron o sufren alguna enfermedad ligada al corazón. No obstante, no se encontró evidencia de altos beneficios para quienes están sanos.
Sin embargo, esto no significa que sea dañino para la salud. Recomiendan a los pacientes comer porciones de estos animales marinos, al menos dos veces a la semana.
En total, el estudio investigó los datos de 192.000 personas, de las cuales al menos 52.000 sufrían afecciones cardíacas.