El caso del presunto hurto de 20.000 euros ocurrido en Guadalmez (Ciudad Real) ha dado un nuevo giro un año y medio después de los hechos. Según hemos podido conocer, el damnificado, un vecino de más de 90 años que vive solo, sospecha ahora que alguien cercano de su círculo familiar pudo ser quien sustrajo la caja metálica que contenía los ahorros de toda su vida. Este giro en sus declaraciones descarta por completo a las personas encargadas de llevarle la comida o realizar las tareas de limpieza en su domicilio.
Un giro en la percepción del damnificado
En su momento, el denunciante, Ángel Díaz Núñez, no señaló a ningún sospechoso en particular, destacando que las personas con acceso a su hogar, tanto familiares como personal de asistencia, no habían mostrado comportamientos sospechosos. Sin embargo, tras analizar los hechos con el paso del tiempo y el impacto emocional de la pérdida, Díaz Núñez ahora está convencido de que el hurto fue cometido por alguien de su entorno más cercano. Esta revelación pone de manifiesto la complejidad del caso y la dificultad para determinar responsabilidades.
El afectado ha declarado sentirse anímicamente destrozado, describiendo sus últimos meses como un auténtico infierno. «Le han robado los ahorros de toda una vida y eso, a su edad, lo tiene completamente deshecho», según refieren personas cercanas a él. A sus 90 años, enfrenta no solo el vacío económico, sino también la devastación emocional de sentirse traicionado.
El contexto del presunto hurto
El hurto, denunciado el 24 de agosto de 2023, habría tenido lugar en el domicilio del afectado entre finales de julio y mediados de agosto de 2023. La caja metálica, que contenía 20.000 euros en efectivo, estaba escondida en un armario y era conocida únicamente por personas de confianza del denunciante, quienes tuvieron conocimiento de su existencia en 2017 tras un ictus que lo llevó a compartir esta información con sus familiares.
En la denuncia original, el afectado señaló que ni la puerta ni las ventanas de su domicilio presentaban signos de acceso forzado, lo que desde el principio llevó a pensar que quien accedió al dinero debía ser alguien con acceso habitual al interior de la vivienda.
Una investigación que sigue abierta
Tras las nuevas declaraciones, las autoridades cuentan ya con esta información actualizada y se entiende que están llevando a cabo las diligencias necesarias para esclarecer este presunto hurto. El objetivo es arrojar luz sobre un caso que ha conmocionado a la comunidad de Guadalmez, donde el afectado es muy querido y conocido por su sencillez y cercanía.
A pesar de los esfuerzos de la Guardia Civil, un año y medio después el caso sigue sin resolverse, lo que agrava aún más la situación emocional del damnificado, quien espera que se haga justicia.
Guadalmez, volcado con su vecino
En medio de la incertidumbre, el pueblo de Guadalmez ha mostrado un apoyo incondicional al afectado, solidarizándose con su situación y acompañándolo en este difícil proceso. Este gesto de unidad refleja la esencia de esta pequeña localidad, que no ha dudado en tenderle la mano a uno de los suyos en un momento tan complicado.
El caso sigue siendo una llamada de atención sobre la importancia de proteger a las personas mayores, especialmente aquellas que, como en este caso, viven solas y en situaciones de vulnerabilidad. Mientras tanto, la comunidad espera que las autoridades puedan resolver este caso y brindar algo de consuelo a un vecino cuya tranquilidad ha sido profundamente alterada.
