«La uci no debería ser la protagonista del covid, porque estaríamos ante una situación grave», asegura el especialista en medicina intensiva.
El mensaje que lanza Pedro Rascado, coordinador del plan nacional de desescalada para las unidades de cuidados intensivos y miembro de la junta directiva de la Sociedad Española de Medicina Intensiva no puede ser más claro: lo mejor que puede ocurrir es que los profesionales de cuidados críticos no tengan que actuar. Sin embargo, los servicios sanitarios tienen que «estar en condiciones para la respuesta» y por ello han elaborado recomendaciones generales para que las ucis estén preparadas para atender posibles brotes y con lo que se aprendió en la primera oleada.