La directora general de Salud Pública, Pilar Aparicio, ha asegurado este domingo que las vacunas Pfizer y Moderna se administrarán indistintamente ya que «no hay diferencia en su efectividad y no hará falta establecer ningún tipo de priorización, dependerá más de temas logísticos».
En una entrevista en la Cadena Ser, Aparicio ha valorado que se hayan adelantado los plazos que en principio eran a mediados de enero, ha recordado que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) ya ha anunciado que evaluará la vacuna de la farmacéutica Moderna el 6 de enero y a partir de ahí «la compañía tiene el compromiso de que en los siguientes 15 días esté disponible».
Aparicio también se ha dirigido a la población que no es proclive a vacunarse y les ha dicho que para que una vacuna se apruebe tiene que pasar unos procesos de seguridad y eficacia. «Y no se ha saltado ningún proceso«, ha asegurado.
La directora general de Salud Pública ha informado de que por «la importancia» de esta vacuna contra la Covid, los ensayos clínicos se han realizado en una horquilla entre 30.000 y 44.000 personas «y eso da una garantía de su seguridad y eficacia».
Aparicio ha augurado que a medida que se avance en el plan de vacunación, la población irá ganando confianza.
Sobre posibles aplazamientos en la recepción de las vacunas, la responsable de Salud Pública ha considerado que los retrasos que ha habido hasta ahora se han debido a problemas logísticos y se ha mostrado confiada en que esto no se vuelva a repetir.
Respecto al transporte de las dosis por vía aérea, Aparicio no ha descartado ninguna vía aérea o terrestre «con tal de que lleguen» si bien ha recordado que el plan inicial era traslado por carretera.