Raúl Jiménez ha tenido que sobreponerse a un drama en estos últimos meses de su vida. Un terrible choque de cabezas en un partido de la Premier le partió el cráneo, literalmente. Esto sucedió hace nueve meses y este fin de semana volvió a jugar al fútbol.
El mejicano, exjugador del Atlético, no recuerda nada de aquel brutal choque, pero lo que siempre tuvo claro es que quería volver al fútbol. Hace años Raúl Jiménez no imaginaba al examinar la máscara de un compañero en el Calderón que su vida acabaría dependiendo de una protección bastante más aparatosa.
Hace 9 meses se fracturó el cráneo y se vivieron momentos de mucha tensión en el césped: «Solo recuerdo llegar al estadio y ver el campo, nada del partido«, deice Raúl Jiménez en una entrevista.
«Nunca pensé en dejar el fútbol pese a las recomendaciones de los médicos»
El mejicano tenía el cráneo fracturado y fue sometido a una delicada operación que le dejó una enorme cicatriz difícil de ocultar. Pero lo importante no era eso sino hacerse la pregunta que ningún jugador quiere escuchar nunca, ¿tendría que dejar el fútbol?
«Nunca pasó por mi cabeza pero obviamente los doctores me dijeron los riesgos que podrían existir si volvía a jugar al fútbol, pero gracias a esto pude vivir más de cerca la infancia de mi hija», explicaba.
Raúl empezó entrenando sin contacto hasta que el diseño de esta especie de turbante reforzado en la zona de la fractura le ha permitido volver a sentirse futbolista: «Simplemente tengo que adaptarme a que ahora tengo una banda en la cabeza», asegura.
Sin duda tendrá que tener cuidado y ya puede acostumbrarse bien a ella porque Raúl es un gran rematador de cabeza. El pasado fin de semana volvió a jugar en la Premier acompañado de un turbante que le acompañará mientras siga jugando al fútbol.