se equivocó con creces. Y es que, más de un mes después de que la guerra comenzara, el Kremlin ve que no todo está saliendo bien. De hecho, ven peor que mejor la situación actual, con miles de soldados muertos, y siete generales del Ejército también liquidados por las tropas de Ucrania.
Este fuerte contraste está obligando a Vladímir Putin a buscar soldados más allá de los que tiene disponibles él mismo entre sus filas. Un ejemplo son los soldados chechenos, conocidos como los más despiadados del planeta, y que están combatiendo en Ucrania al mando de su sanguinario jefe, el presidente checheno Ramzán Kadyrov, uno de los más fieles servidores de Putin.
Se sabe que el presidente de Rusia también ha tratado de reclutar a combatientes sirios para combatir en la guerra, y no se descarta que también esté tratando de hacer lo mismo con militares de Estados títeres en su poder, como es el caso de Bielorrusia, Kazajistán o la región separatista de Transnistria, ubicada en Moldavia y con fuerte presencia rusa.
Más de 20.000 soldados rusos muertos, según Ucrania
Ucrania dice que más de 20.000 soldados de Rusia habrían muerto la invasión, una cifra que los rusos no reconocen ni de lejos, y que han llegado a tachar de «exageración de la prensa occidental». Lo cierto es que muchos medios de comunicación apuntan ya a nivel mundial que Rusia estaría enterrando a sus soldados muertos en tumbas clandestinas para ocultar sus bajas.
La cuestión principal es si Putin quiere poner fin a la guerra, y en la que se centran ahora todas las partes, después de que Rusia dijera que había cumplido «su misión inicial en Ucrania», y que, de ahora en adelante, «centraría todos sus esfuerzos en liberar el Donbás», hecho que desató numerosas teorías sobre esta cuestión por ambas partes del conflicto.
Mientras hay quienes piensan que es una salida adelante ante el fracaso que está siendo para Rusia el hecho de no poder conquistar toda Ucrania tras un mes de guerra, otros consideran que está tomándose un tiempo para reconsiderar su estrategia y que las tropas rusas puedan recobrar la fuerza perdida durante estas semanas de guerra.