Pedro Sánchez no cierra la puerta a la petición de investigar en el Congreso los abusos en la Iglesia

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presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, durante el acto en Alcalá de Henares (Madrid) sobre las pensiones, no ha rechazado la posibilidad de una investigación en el Congreso de las agresiones y abusos sexuales a menores en el seno de la Iglesia católica. Una investigación que ha sido propuesta por Unidas Podemos, ERC y EH-Bildu.

Sánchez no descarta esta posibilidad ni que el Gobierno descarte tomar alguna decisión, asegura que lo primordial es hablar con las víctimas de los abusos y atender sus testimonios. Por parte del Partido Popular, consideran que si han existido abusos en la Iglesia, la investigación tiene que correr a cargo de los jueces y no en el Congreso.

«La pelota está en el tejado del PSOE; le pedimos que se atreva», declaraba Isabel Pozueta, diputada de EH-Bildu el pasado miércoles en la Cámara Baja. El objetivo de la investigación en el Congreso es disponer de información concreta para poder planificar las políticas públicas de reparación, prevención y atención de las víctimas de los abusos.

Sánchez no cierra la puerta

Los tres partidos que han propuesto la investigación en el Congreso denuncian la «opacidad» de los abusos y agresiones sexuales durante décadas en la sociedad. Argumentan que el «poder político ha sido cómplice por omisión».

Pedro Sánchez ha manifestado en Alcalá de Henares: «Vamos a hablar y a construir». El presidente del Gobierno añadía en su conversación informal con los periodistas que su charla este jueves con el escritor Alejandro Palomas ha sido «muy conmovedora». El escritor ha denunciado sufrir abusos sexuales durante su infancia. Afirma que con ocho años fue violado y sufrió continuos abusos sexuales por parte de un profesor de la Salle de Premià de Mar en Barcelona.

«Es importante la dimensión humana de este problema y la valentía de Palomas», ha remarcado Sánchez. Los padres del Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil y Premio Nadal 2018 denunciaron los abusos a su hijo a la dirección del colegio, donde les aseguraron que no sucedería más. Fue entonces cuando Palomas pasó a ser el «apestado».

Los apoyos del Gobierno de Pedro Sánchez piden que la comisión investigue durante al menos seis meses la existencia de estructuras y redes que tapen las agresiones sexuales dentro de la Iglesia, el grado del conocimiento de los abusos de la Iglesia o instituciones públicas, el número de víctimas y agresores.