La alcaldesa de París, Anne Hidalgo, propondrá al Gobierno de Francia que imponga 3 semanas de confinamiento para la ciudad con el fin de reducir el número de infecciones por coronavirus. Según Hidalgo, el toque de queda, actualmente vigente en París, es insuficiente para disminuir la curva de contagios.
París propone un confinamiento de 3 semanas
Así lo ha explicado el vicealcalde Emmanuel Grégoire. «La evolución es inquietante y requiere que pensemos en medidas complementarias«. Según Grégoire, restricciones como el toque de queda, entre las 6 de la tarde y las 6 de la mañana, está resultando poco efectivo y es «peor» porque «estas medias medidas dan malos resultados».
Ciudades francesas como Niza o Dunkerque mantienen el confinamiento durante los fines de semana. Pero el vicealcalde opina que esto tampoco funciona: «Es poco eficaz en el plano sanitario y problemático por el impacto social. Si la tendencia continúa, en una semana estaremos ante un desastre absoluto». La solución sería una cuarentena «simple para recuperar el oxígeno y tener la perspectiva de reabrir todo en 3 semanas».
El teletrabajo obligatorio es también una de las opciones que barajan las autoridades parisinas, sumadas a otras medidas «focalizadas, con discernimiento y de duración limitada»
La incidencia acumulada de coronavirus por cada 100.000 habitantes en la capital francesa es de 304, frente a los 207 casos de media que hay en el resto del país.
Preocupación por la variante británica
La cepa británica del coronavirus preocupa especialmente a las autoridades sanitarias de Francia. En los últimos días ha disparado los contagios y ya supone la mitad de los positivos del país.
Hoy el primer ministro francés, Jean Castex, ha anunciado que 20 regiones permanecerán en «vigilancia reforzada» y si la situación empeora se les aplicarán nuevas restricciones a partir del próximo 6 de marzo. La veintena de territorios suman casi el 40 % de la población y superan los 250 casos por cada 100.000 habitantes.
Desde el inicio de la pandemia se han contagiado 3.686.813 franceses, mientras que otros 85.582 han perdido la vida por la COVID-19.