Nadia Calviño, actual vicepresidenta primera y ministra de Asuntos Económicos, manifestó recientemente el profundo honor que representa ser propuesta por España para encabezar el Banco Europeo de Inversiones (BEI). Durante una rueda de prensa en Cádiz, subrayó la singularidad y fortaleza que su candidatura aporta en el panorama europeo.
Un Escenario Estratégico para España y Europa
Según la perspectiva de Calviño, el BEI no es solo una entidad financiera, sino una institución estratégica esencial para el presente y el futuro de España y Europa. Enfatizó su papel determinante en impulsar inversiones tanto públicas como privadas. Pero hay más: anticipa un papel aún más crucial del BEI en la financiación de transformaciones sostenibles y en la reindustrialización del bloque europeo.
¿Por qué Calviño?
A raíz de varios contactos informales después de las elecciones generales, se percibió que, frente al nivel de las demás candidaturas, la propuesta de Calviño maximizaba las posibilidades de éxito. Aseguró que, al presentar su nombre, España no solo hace una fuerte declaración de intenciones, sino que, de lograrse, sería un hito sin precedentes, ya que sería la primera vez que el país ostentara la presidencia del BEI.
Un Compromiso Inquebrantable con España
La vicepresidenta no dudó en recalcar que su candidatura no colisiona con sus responsabilidades actuales. De hecho, recalcó que el presidente Sánchez respalda firmemente su candidatura y reiteró su compromiso con él en continuar liderando las riendas económicas del país.
De ser seleccionada, esta victoria sería la culminación de un esfuerzo constante de cinco años. A través de este periodo, Calviño ha trabajado arduamente para que España tenga una voz resonante y gane el respeto de la esfera internacional, reafirmando su posición como la cuarta economía de la Unión Europea.
Rompiendo Barreras y Estableciendo Precedentes
Un punto digno de mención es la perspectiva de género que este proceso de selección podría transformar. Si Calviño es elegida, haría historia no solo por ser la primera representante de España en ocupar este cargo, sino por ser la primera mujer en presidir el BEI. En toda la historia del banco, ha habido siete presidentes, todos varones y ninguno de ellos español.