La crisis del coronavirus ha provocado un gran atasco a la hora de realizar los exámenes de conducir. En estos momentos hay más de 300.000 alumnos a la espera de examinarse, lo que supone el triple de personas que en condiciones normales.
Normalmente los alumnos pendientes de formación se encuentran en torno a los cien mil, pero la pandemia ha disparado esta cifra. A causa del coronavirus, los aspirantes se han ido acumulando y la cifra casi se ha triplicado. Además, la bolsa no deja de crecer.
Por ello, la DGT ya está tomando medidas. Han aumentado la jornada de por la tarde e intentan aumentar la prestación de servicios pero aun así es insuficiente. Se están impartiendo clases y realizando exámenes en agosto, algo completamente inédito hasta ahora y forzado por la crisis del coronavirus.
Además de estas medidas, sigue resultando imprescindible que haya más examinadores para que se desahogue la demanda de alumnos y se puedan examinar. Las grandes ciudades de España como Barcelona, Valencia y Madrid son también las más afectadas por las listas de espera para los exámenes de conducir.
En Madrid, la demora es superior a cuatro meses y los alumnos temen que la espera se alargue. También les preocupa que no puedan llegar a examinarse en caso de nuevo confinamiento por la pandemia de covid-19.