Si su hijo está inscrito en una escuela infantil municipal y debe volver a casa porque en su grupo burbuja hay un caso positivo en Covid, los servicios sociales se ocuparán de atenderle. Esto en caso de que ninguno de los padres tengan posibilidad de teletrabajar.
La vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís, ha anunciado este viernes un refuerzo de las medidas de conciliación del Ayuntamiento de Madrid para «ayudar a las familias usuarias de las escuelas infantiles municipales en el caso de que sus hijos deban volver a casa por el cierre del centro o por un caso positivo en su grupo burbuja». Con el nombre «Plan B: Concilia», el servicio dará prioridad a los niños cuyos padres no puedan teletrabajar y necesiten un acompañamiento a domicilio mientras dura su cuarentena. «Estamos totalmente comprometidos con la conciliación y el apoyo a las familias», ha señalado Villacís.
Eso sí, tal y como explican desde el área de Familias e Igualdad Social dirigido por el delegado Pepe Aniorte, «no es para casos positivos en Covid, sino para los niños que pertenezcan al grupo burbuja y que se ven obligados a guardar aislamiento hasta tener la prueba».
Serán los Servicios Sociales los que valorarán qué niños pueden estar en situación de necesitar el apoyo del programa. «El objetivo es apoyar en todo lo posible a las familias en estos momentos con tantas dificultades para conciliar», ha recalcado Villacís. Además, según ha explicado la vicealcaldesa, estos profesionales estarán equipados con los equipos de protección individual adecuados para desempeñar su labor con las mayores medidas de seguridad.
Esta nueva medida se suma al protocolo que avanzó 20minutos al comienzo del curso escolar y que incluye una bajada de las ratios en las aulas y un refuerzo en las labores de limpieza. Alrededor de 8.000 menores, de entre los 0 y los 3 años, arrancaron el curso el pasado 7 de septiembre./ BELÉN SARRIÁ