Los premios económicos de las 500 Millas de Indianápolis disminuyeron en una edición en la que el coronavirus obligó a celebrar la prueba a puerta cerrada en el mítico circuito del óvalo.
El ganador, el japonés Takuma Sato, se llevó un premio de 1.158.000 euros, menos de la mitad que en la edición de 2017, cuando también se hizo con la victoria. En este año 2020 se han reducido a la mitad los premios (6,3 millones de euros).
¿Cuánto se llevaron los españoles? Cabe recordar que la Indy no distribuye los premios por la posición en parrilla de los pilotos sino por un complejo algoritmo. De ahí la llamativa diferencia entre Fernando Alonso y Álex Palou.
El asturiano se llevó el mínimo, 84.650 euros, a pesar de finalizar la carrera en el 21º puesto. Palou, que sufrió un accidente y no completó la prueba, se hizo con 173.000 euros.
El piloto novato en la prueba se encontraba en plena lucha por la victoria cuando sufrió un aparatoso accidente. Al igual que el resto de rookies, Palou no pudo cruzar la línea de meta. Algo habitual en Indianápolis.
El caso de Alonso fue diferente. Había completado la mitad de su remontada cuando sufrió un problema en su embrague y perdió una vuelta. Finalmente su posición fue la 21ª, aunque de no ser por estos problemas podría haber terminado en el top-10.