fiestas patronales en muchos municipios de España. Sin embargo, lejos parecen quedar los tiempos de aglomeraciones y fiestas hasta bien entrada la madrugada. El coronavirus ya obligó a suspender las fiestas en 2020. Este año, con una alta incidencia de la enfermedad, pero también con el plan de vacunación muy avanzado, muchas localidades han reinventado las fiestas para poder celebrar dentro de las restricciones sanitarias.
En el último Consejo Interterritorial de Salud, uno de los argumentos más repetidos fue el de «no bajar la guardia». Especialmente, porque este fin de semana casi 1.200 municipios tendrían que celebrar sus fiestas patronales en honor a la Virgen de la Asunción al tiempo que se prevé que se alcance el pico de ocupación en las UCI.
Fiestas que se modifican en Madrid
Un ejemplo de las fiestas que se modifican está en Madrid. La capital celebra este fin de semana las fiestas de La Paloma, pero como ya ocurrió con las fiestas de San Cayetano y San Lorenzo, no se podrán sacar las barras a la calle y en todos los actos habrá un aforo limitado y será obligatorio cumplir con el uso de mascarilla y distancia de seguridad.
Tampoco habrá procesión ni otras tradiciones callejeras. Sí que habrá actividades en Las Visitillas con un protocolo sanitario y se celebrará una misa solo para invitados. Del mismo modo, se intensificará la seguridad para evitar aglomeraciones.
Sin peñas en Castilla y León
Castilla y León también prorroga sus restricciones para evitar un incremento en los contagios durante las últimas semanas de agosto. De hecho, las peñas se mantendrán cerradas y la celebración del actos como verbenas y pasacalles deberán hacerse en un recinto cerrado, al aire libre y con mascarilla. Además, deberán acabar a las 1:30 horas como máximo.
Del mismo modo, las romerías y procesiones también deberán cumplir con estas medidas. Los asistentes deberán estar sentados en un espacio al aire libre en el que no se podrán superar las 1.000 personas y donde no estará permitido tocar o besar las imágenes religiosas. Tampoco se podrá comer.
La Comunidad Valenciana también intensifica la vigilancia durante este fin de semana de agosto. De hecho, la Generalitat ha pedido al TSJCV que de el visto bueno a prorrogar restricciones como el toque de queda en municipios con una alta incidencia, así como la limitación de reuniones de personas a 10. Algunos municipios incluso han optado por cerrar sus playas por la noche.
Una de las fiestas más populares en todo el territorio son las fiestas de Elche, que culminan con en su día grande con la Nit de l’Albà. Sin embargo, el Ayuntamiento ha decidido suspenderlas. Por segundo año consecutivo, no se podrá disfrutar del espectáculo pirotécnico, aunque sí habrá otras actividades como conciertos en los que se deberán cumplir todas las medidas sanitarias. También, se cantarán motetes del Misteri d’Elx durante los próximos 14 y 15 de agosto con un aforo limitado.
Este año vuelven también las fiestas del barrio de Gràcia a Barcelona, aunque como todos los municipios que celebran fiestas lo harán con restricciones. Se harán actividades, conciertos y concursos con aforo limitado en los que será imprescindible la mascarilla. Además, será necesario adquirir entrada previa como medida de control de aforo para cualquiera de las actividades.
Restricciones en todas las comunidades
En general, todas las comunidades van a hacer un estricto seguimiento de las fiestas y las posibles aglomeraciones que se puedan generar para que no repercuta en más contagios. La Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) se ha comprometido a intensificar la vigilancia de las celebraciones festivas y especialmente este fin de semana.
Aragón ha suspendido todas las fiesta patronales durante lo que resta de verano debido a la incidencia y a los contagios por coronavirus. En Navarra, se mantiene el toque de queda nocturno para limitar las concentraciones en las 28 fiestas patronales previstas.