16 días de guerra en Ucrania y la ofensiva rusa no se detiene, un claro ejemplo es el bombardeo sobre el reactor nuclear experimental de Járkov, además de las amenazas sobre las armas biológicas. La Casa Blanca está convencida de que Putin busca la excusa para utilizarlas. Rusia ha solicitado una reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad de la ONU para tratar hoy viernes sobre las cuatro de la tarde lo que llamó «las actividades militares biológicas de Estados Unidos en el territorio de Ucrania».
El Consejo se convocó de manera extraordinaria para hoy con la intención de tratar el tema de las armas biológicas como único punto del en el orden del día.
La misión rusa ante la ONU anticipó en su cuenta de Twitter que disponen de «resultados de los análisis de documentos relativos a las actividades militares biológicas de Estados Unidos en Ucrania», resaltando algunos estudios sobre los cambios en el comportamiento de aves y otros animales en ese país.
Cruce de acusaciones
Esta convocatoria urgente del Consejo de Seguridad de la ONU se produce en unos momentos en los que predominan las acusaciones cruzadas entre Rusia y Estados Unidos de utilizar armas biológicas en Ucrania. Aunque, el portavoz de la ONU, Stéphane Dujarric, dijo en referencia a la acusaciones de Moscú que la ONU no tiene constancia de ese uso.
El gobierno ruso ha asegurado en los últimos días que su Ejército ha descubierto en Ucrania pruebas de una «eliminación de emergencia» de rastros, lo que apunta a la existencia de un supuesto programa biológico-militar que se ha desarrollado en Ucrania y ha sido financiado, según Moscú, por Estados Unidos.
El portavoz del Ministerio ruso de Defensa, Igor Konashenkov, ha asegurado que empleados de esos laboratorios biológicos informaron, supuestamente, de la destrucción el pasado 24 de febrero de patógenos peligrosos como la peste, el ántrax, la tularemia, el cólera y otras enfermedades mortales mientras que la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, advirtió de que Rusia podría estar planeando el uso de armas químicas o biológicas en Ucrania como respuesta a las «falsas» acusaciones rusas contra Washington.