La comisión que enterrará los símbolos franquistas empieza el trabajo

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Está formada por representantes de Raxoi, la USC y asociaciones ciudadanas // Entre sus funciones figura homenajear a los represaliados por la Guerra Civil.

En el mes de septiembre de 2019 se aprobó en pleno una propuesta del BNG enmendada por CA y el grupo socialista para la creación en Santiago de una comisión especial de memoria histórica, similar a la que ya existe en otras ciudades, con el objetivo no solo de eliminar los símbolos del bando victorioso en la Guerra Civil, de los que pocos quedan ya en la ciudad, sino sobre todo para homenajear a las personas que fueron asesinadas o represaliadas durante y después de la finalización de la contienda.

En concreto, se solicitaba la construcción de un monumento en recuerdo del que fuera alcalde republicano, Ánxel Casal, y a Germán Fernández, ambos asesinados poco después del golpe de Estado, acompañado de una inscripción con los nombres “das persoas executadas ou presas durante o franquismo”. También figuraba en el documento la propuesta de instalar una placa en el aeropuerto de Lavacolla recordando la existencia en la zona de un campo de concentración que funcionó después de la Guerra Civil.

En concreto, según explicaba Goretti Sanmartín en la presentación de la propuesta, esta comisión “debe servir para trazar as liñas dunha política que permita coñecer a memoria histórica e superar as fendas que se produciron despois de 1936 e que faga que a poboación de Santiago coñeza esas 226 veciñas e veciños que sufriron algún tipo de represión segundo recolle o traballo de Nomes e Voces de investigación da USC”. “Entendemos que se debe facer unha política de recoñecemento das vítimas para que se aplique esa xustiza e reparación mais tamén pescudar na investigación dos represores”, concluía.

El acuerdo contó con los votos favorables de los tres grupos y la abstención del PP, quedó paralizado con la llegada de la pandemia, y fue objeto de una interpelación plenaria por parte del BNG el pasado febrero, instando a su constitución. Un acto que tuvo lugar en el salón verde de Raxoi, en el que solo participaron los representantes municipales, el alcalde, Xosé Sánchez Bugallo; el concelleiro de Relacións Institucionais, Sindo Guinarte, y los concejales de la oposición, Alejandro Sánchez-Brunete (PP), Branca Novoneyra (CA), y Goretti Sanmartín (BNG), además del secretario municipal.