estafadores ven negocio en cualquier lugar. El último mercado que está empezando a tener problemas por las tentativas de fraude es el de las vacunas contra el COVID-19. La Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol) ha alertado este lunes a los gobiernos de sus Estados miembro que ya se han registrado unos 60 casos en 40 países de personas en los ministerios de Sanidad o en hospitales que han recibido ofertas fraudulentas para la compra de sueros inmunológicos.
La organización advierte que, por regla general, estos estafadores se presentan como representantes de alguna farmacéutica que desarrolla las vacunas contra el COVID-19 o como alguna agencia gubernamental que se encarga de su distribución. Baja esta identidad falsa, tratan de convencer a los potenciales compradores mediante correos electrónicos personales o profesionales e, incluso, por llamadas telefónicas.
Avisar a la policía aunque el fraude fracase
La Interpol ha comunicado el aviso a sus 194 estados miembros y, aunque la información recopilada continúa en proceso de investigación, han advertido a los laboratorios farmacéuticos en relación con estas prácticas de engaño, que incluye el uso de falsas cuentas de redes sociales y páginas web, para que tengan en cuenta los problemas a los que pueden tener que enfrentarse en un futuro.
El Secretario General Interpol, Jürgen Stock, insiste en que es importante la cooperación entre sector público y privado para evitar este tipo de situaciones. «Incluso cuando el fraude fracasa, es importante informar a la policía para que se puedan identificar los vínculos potenciales y también, como en el caso de la alerta que Interpol ha lanzado, advertir a las fuerzas del orden sobre esos riesgos», asegura.
En un momento en el que los países se esfuerzan para vacunar de manera segura y rápida a todos sus ciudadanos es de vital importancia evitar caer en este tipo de fraudes: «Es vital que el proceso esté protegido desde la fabricación hasta la entrega», ha explicado el responsable ejecutivo.