Para muchos, la idea de arrancar el día sin una taza de café resulta inimaginable. Creemos necesitar ese impulso de energía que supuestamente nos brinda. Pero, según una reciente investigación, lo que muchas personas consideran como el “poder” de esta popular infusión, podría no ser más que un efecto placebo.
Investigación Sobre el Efecto del Café
Investigadores portugueses han hecho un descubrimiento interesante que podría poner en cuestión nuestra percepción del café. En un estudio publicado en la revista Frontiers in Behavioral Neuroscience, argumentan que, pese a la creencia común de que el café aumenta el estado de alerta y el funcionamiento psicomotor, las impresiones subjetivas aún no tienen una correlación neurobiológica comprobada.
El equipo de investigadores reclutó a personas que consumían al menos una taza de café al día. Les pidieron que se abstuvieran de comer o beber bebidas con cafeína durante al menos tres horas antes del estudio. Posteriormente, realizaron dos breves resonancias magnéticas funcionales: una antes y otra 30 minutos después de tomar cafeína o beber una taza de café estándar.
Los Efectos Neuroquímicos del Café
Ante los efectos neuroquímicos conocidos del consumo de café, los científicos esperaban que las resonancias magnéticas funcionales mostrarían que las personas que bebían café tenían una mayor integración de redes vinculadas a la corteza prefrontal (asociadas con la memoria ejecutiva) y la red de modo predeterminado, involucrados en procesos de introspección y autorreflexión.
Sin embargo, los resultados fueron sorprendentes. En lugar de aumentar la conectividad de la red de modo predeterminado, descubrieron que ésta disminuía tanto después de beber café como después de tomar cafeína, lo que indica que consumir cafeína o café hizo que las personas estuvieran más preparadas para pasar del descanso al trabajo en las tareas.
La Caféina y la Alerta Mental
Algunos estudios muestran que la cafeína tiene efectos sobre el rendimiento cognitivo y el estado de ánimo si los bebedores no habituales de café la toman, pero que estos efectos pueden disminuir debido al desarrollo de la tolerancia, según afirma la investigación.
El estudio sugiere que el supuesto poder estimulante del café podría estar más relacionado con factores como el olor y sabor particular de la bebida, o la expectativa psicológica asociada con el consumo de esa bebida, más que con la cafeína en sí.
La Caféina: ¿Un Verdadero Estimulante o un Placebo?
La paradoja de la cafeína es que a corto plazo parece ayudar con la atención y el estado de alerta, así como con algunas tareas cognitivas y los niveles de energía, pero su impacto a largo plazo puede tener el efecto contrario, advierte Mark Stein, profesor del Departamento de Psiquiatría y Ciencias del Comportamiento de la Universidad de Washington.
En conclusión, la verdadera efectividad de la cafeína como estimulante sigue siendo un tema de debate. ¿Es su impacto en nuestra energía y productividad meramente un efecto placebo, o hay algo más en esta popular bebida que nos mantiene volviendo por más? ¿Te hace replantear tu ritual matutino de café?