Contexto
Emiliano García-Page, presidente de Castilla-La Mancha y uno de los barones socialistas más críticos con Pedro Sánchez, ha vuelto a mostrar su desacuerdo con el actual presidente del Gobierno en funciones. Esta vez, su crítica se centra en la posible negociación de una amnistía con partidos independentistas como Junts para la investidura de Sánchez.
Argumentos de García-Page
Falta de «Base Moral»
Según García-Page, pactar con partidos independentistas para amnistiar a sus encausados carecería de «base moral» y violaría el principio de igualdad ante la ley para todos los españoles.
«Autoamnistía»
El presidente de Castilla-La Mancha también señala que sería una «autoamnistía», ya que los votos de los propios independentistas serían necesarios para aprobarla. En su opinión, esto es equivalente a ser «juez y parte».
Incompatibilidad con la Constitución
García-Page advierte que tal planteamiento sería contrario a la Constitución Española, que establece la igualdad ante la ley y no permite que «cualquier delito con un voto más en el Congreso se pueda amnistiar».
Caso de Carles Puigdemont
Además, García-Page menciona que Carles Puigdemont, el expresidente de la Generalitat de Cataluña, solo tiene pendientes delitos de malversación si regresa a España. Por lo tanto, considera que no sería «serio» discutir si debe ser amnistiado o no.
Conclusión
Las declaraciones de Emiliano García-Page añaden más tensión al ya complicado escenario político en España, especialmente en lo que respecta a la formación de un nuevo gobierno. Sus críticas reflejan una división dentro del Partido Socialista sobre cómo abordar la cuestión de los independentistas y la gobernabilidad del país.