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El Grupo Socialista exige que se rectifique y se muestre el símbolo de la diversidad en el balcón del Consistorio como gesto de respeto e inclusión.

Profunda indignación ante la omisión del símbolo LGTBI+

El Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Ciudad Real ha expresado públicamente su “profunda indignación y rechazo” ante la decisión del equipo de Gobierno municipal, encabezado por el alcalde Paco Cañizares, de no colocar la bandera arcoíris en el balcón del Ayuntamiento con motivo del Día Internacional del Orgullo LGTBI+.

Según el comunicado difundido, el PSOE considera que esta decisión representa “un grave retroceso en el compromiso institucional con los derechos humanos, la diversidad y la igualdad” y transmite un mensaje de exclusión hacia un colectivo que históricamente ha sufrido discriminación.

Una petición formal ignorada

Los socialistas detallan que solicitaron por escrito la colocación de la bandera en la fachada del Consistorio, “entendiendo que es la casa de todos y todas los ciudadrealeños”. Sin embargo, denuncian que no recibieron respuesta oficial alguna por parte del Gobierno municipal.

La única contestación llegó, afirman, a través del portavoz del equipo de Gobierno durante una rueda de prensa, y únicamente tras ser preguntado por los medios de comunicación, sin iniciativa previa ni pronunciamiento institucional.

Apoyo de PRIDE-CLM a la denuncia del PSOE

El malestar expresado por el Grupo Municipal Socialista cuenta con el respaldo de la asociación PRIDE-CLM, un colectivo regional que trabaja en defensa de los derechos LGTBI+ y que ha mostrado su desacuerdo con la negativa municipal, calificándola como una decisión “excluyente y poco representativa de los valores democráticos de Ciudad Real”.

Desde la asociación se ha subrayado que la bandera del arcoíris es mucho más que un símbolo, ya que representa la lucha por la igualdad, la visibilidad del colectivo y el rechazo a cualquier forma de discriminación. En este sentido, han considerado que no colocarla en una fecha tan significativa constituye una omisión grave en el marco de las políticas de inclusión.

Un símbolo necesario en tiempos de retroceso

El PSOE de Ciudad Real ha recordado que, en un contexto social en el que los discursos de odio han ganado visibilidad, la colocación de la bandera arcoíris no es una mera formalidad, sino un acto necesario de reafirmación de valores democráticos y de apoyo institucional a la diversidad.

“El Ayuntamiento debe ser un espacio para todos, y su fachada debe reflejar los principios de igualdad, respeto y libertad”, han señalado, exigiendo al equipo de Gobierno que rectifique de inmediato y permita que la bandera ondee como en años anteriores.

Compromiso firme con la igualdad y la visibilidad

El Grupo Socialista ha reiterado su compromiso con la igualdad real y efectiva, y ha anunciado que continuará trabajando desde las instituciones “para que la diversidad no sea silenciada ni invisibilizada”.

Asimismo, aseguran que mantendrán su colaboración con los colectivos LGTBI+ para promover políticas públicas inclusivas y seguir avanzando en la defensa de los derechos del colectivo, especialmente en momentos donde estos se ven amenazados por determinadas decisiones políticas.


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