entrar en museos, bares, comercios, restaurantes y transportes de largo recorrido. Durará hasta el 31 de octubre y no ha gustado nada al 35% de la población gala.
El pase obliga a inocularse la vacuna y no a todos les gusta. Italia lo exigirá a partir del 5 de agosto en ocio y restaurantes. La alternativa es una PCR o documentar que se ha pasado la Covid. Bélgica y Alemania lo están estudiando. Portugal y Grecia llevan varias semanas poniéndolo en práctica, aunque no les guste a todos.
Cada vez son más las restricciones contra los no vacunados para evitar que suban los contagios. La variante Delta ha endurecido el tono en Europa y Australia. En Estados Unidos ya hasta el expresidente Donald Trump anima a vacunarse.
Y para los que tienen miedo de las agujas, Israel investiga una vacuna contra la Covid con forma de pastilla. Los ensayos comienzan el mes que viene.