En un esfuerzo por combatir el cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, el Gobierno español, bajo el acuerdo de coalición entre el PSOE y Sumar, ha reactivado el debate sobre la restricción de vuelos de corta duración que puedan ser reemplazados por viajes en tren. Este enfoque, que busca promover la sostenibilidad ambiental, plantea limitar los vuelos domésticos cuando exista una alternativa ferroviaria de menos de dos horas y media, exceptuando las conexiones de enlace con vuelos internacionales.
El Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, liderado por Óscar Puente, ha iniciado un estudio técnico para evaluar tanto el impacto de la medida en la conectividad aérea española como los beneficios ambientales que podría generar, teniendo en cuenta las restricciones establecidas en el acuerdo PSOE-Sumar.
Diálogo con el Sector Aéreo y Posibles Impactos
Aunque el ministro Puente ha reconocido que la medida podría tener un alcance limitado, se ha comprometido a dialogar con el sector aéreo para explorar la viabilidad de estas restricciones. Sin embargo, hasta el momento, no se ha iniciado un proceso de negociación con las aerolíneas, lo que genera incertidumbre sobre la implementación efectiva de la política.
Las compañías aéreas han expresado su rechazo a la prohibición de vuelos cortos, argumentando que tal medida comprometería la conectividad para los pasajeros de regiones fuera de Madrid, potencialmente desviándolos hacia otros hubs europeos para vuelos de largo recorrido. En lugar de imponer restricciones, el sector aboga por fomentar la intermodalidad, sugiriendo que las líneas de tren de alta velocidad lleguen directamente a los principales aeropuertos para facilitar combinaciones de viaje más sostenibles.
El Futuro de la Movilidad y el Papel del Tren de Alta Velocidad
La propuesta del Gobierno se enfrenta a la realidad de un mercado en el que el tren de alta velocidad ya ha comenzado a desplazar al avión en varios corredores importantes, capturando una cuota significativa de pasajeros. La liberalización ferroviaria y la competencia de operadores privados han acelerado esta tendencia, demostrando la viabilidad y preferencia por alternativas más sostenibles al transporte aéreo para distancias cortas.
Mientras el debate continúa, el enfoque hacia una movilidad más sostenible y la búsqueda de soluciones que equilibren las necesidades de conectividad con la urgencia de la acción climática se mantienen como prioridades clave para el Gobierno y el sector del transporte en España.