La medallista olímpica aseguró ser «tolerante, aceptar» y saber que todo se trata de «progreso», pero comentó que la actuación del gimnasta «es demasiado». «¿A dónde los llevará este camino y por alguna razón estoy segura de que al final se enfrentarán aun callejón sin salida», explicaba a gimnasta.
«Esto es un mensaje más de los muchos que me he encontrado a lo largo de mi carrera deportiva«. Cristofer lleva más de 15 años compitiendo y defendiendo que cada uno puede vestir como quiera, porque además está justificado.
«Un romano lleva una falda y un príncipe de Egipto igual»
«Me pongo diademas, me pongo mallas con falditas coherentes, como por ejemplo un romano lleva una falda o el príncipe de egipto lleva una falda. Siempre y cuando con coherencia, con la música de Gladiator no me pongo un tutú, no tiene sentido», explica el patinador.
Las críticas rusas han provocado que todo el mundo se ponga del lado de Cristofer. El COE, la federación, grandes deportistas, todos le han mostrado su cariño: «Me ha afectado más toda la avalancha de cariño que he tenido en cuanto a sentimientos que lo de ella«. Y ese apoyo es lo único que debería recibir