El ERE para 1.144 trabajadores que ha comenzado a negociarse en Ford España ante el cese de la producción de dos modelos en abril afectará a unos 960 empleados de la planta de vehículos y 140 de motores, según la primera estimación realizada.
Otros 20 empleados de oficinas de la planta de Almussafes y alrededor de 14 de las oficinas centrales de Ford en Madrid, dedicadas a marketing y ventas y distribución, se incluirán en el expediente de regulación, según informan a EFE fuentes sindicales.
El pasado viernes la comisión negociadora del ERE celebró la primera sesión y este jueves continuará con las reuniones, dentro del plazo de un mes con que cuenta el periodo de negociación del expediente, que forma parte del redimensionamiento de la plantilla iniciado por la multinacional en Europa para electrificar su gama de vehículos.
El sindicato UGT ha afirmado que el “volumen más que considerable” de ajuste de empleo “dificulta” alcanzar un acuerdo que garantice la voluntariedad del 100 % de las bajas a través de planes de acompañamiento hacia la jubilación y bajas incentivadas.
La plantilla de Ford Almussafes: unas 5.800 personas
Tras el último ERE de 2021 en que salieron los trabajadores de más edad, Ford Almussafes cuenta con una plantilla más joven, de unas 5.800 personas, en la que no más de 500 empleados superan los 56 años, según cálculos sindicales, por lo que se ve complicado acordar un cien por cien de salidas voluntarias.
Además, la planta de motores, con un millar de empleos y que suministra motores a Estados Unidos y también fabrica para el Kuga híbrido, afronta dificultades a medio plazo por el proceso de electrificación de la multinacional.
UGT Ford, mayoritario en el Comité de empresa de la planta de Almussafes, señala que es consciente de que la situación actual no es la misma que había hace dos años cuando se negoció el último ERE y, por tanto, la negociación va a ser complicada, de la misma manera que reducir el impacto del expediente en número de afectados.
Ahora existe un plan de ajuste de Ford que ha anunciado que eliminará 3.800 empleos en Europa, el 11 % del total de su plantilla en esta región, como parte de su plan de transición para la fabricación exclusiva de vehículos eléctricos, y se afronta un posible cierre de la planta alemana de Saarlouis, alerta el sindicato sobre la situación actual.
Respecto a la negociación del ERE en España, la compañía ha afirmado que trabajará de forma constructiva con los sindicatos para reducir el impacto en los empleados, mientras que UGT advierte de que la empresa no puede pretender abaratar las condiciones de los planes anteriores, sino buscar el mayor número de voluntarios, mientras que otro de los sindicatos, el STM, afirma que no consentirá ninguna salida traumática.
La próxima reunión de la comisión negociadora del ERE se celebrará el jueves 16 de marzo, a las 10 horas.